El capitán de la Selección, autor de un gol en la victoria por 2-0 ante Australia, fue buscado por todos en su paso por Beijing.
No hay dudas de que Lionel Messi es una leyenda viviente del fútbol y que revoluciona cualquier país a donde vaya. Un claro ejemplo fue lo que se vivió en China en las últimas horas y, principalmente, en la victoria por 2-0 que consiguió la Argentina en el amistoso ante Australia disputado en el Workers Stadium de Beijing. El capitán demostró que el furor por él llega a cada rincón del planeta.
Una de las imágenes que más reflejó la adoración por Messi en territorio asiático se vio durante el entretiempo, cuando los jugadores argentinos caminaban por los pasillos del estadio para regresar al campo de juego y disputar el complemento.
La transmisión de TV mostró a la Pulga, que se cerraba la fila junto con Rodrigo De Paul y Ángel Di María, ser detenido por unos de los jueces de línea para que le firme un autógrafo. El árbitro asistente no quiso perderse la oportunidad de llevarse un recuerdo del mejor jugador de todos los tiempos.
Ya en plena disputa del segundo tiempo del partido, antes de que Germán Pezzella anota el segundo gol, Leo Messi volvió a ser solicitado, esta vez por un hincha que invadió el campo de juego. En el minuto 20 del complemento, mientras el capitán del combinado albiceleste se disponía a ejecutar un córner, un joven eludió la seguridad para ingresar al campo e intentar abrazar a su ídolo.
Aunque la transmisión oficial optó por no mostrar las imágenes, sí se pudo observar el rápido accionar de las fuerzas encargadas de resguardar la integridad de los futbolistas al correr por detrás del astro argentino para intentar interceptar al invasor.
Una cámara de TyC Sports mostró que el hincha llegó a darle un abrazo muy breve a Messi antes de salir corriendo para escapar de la seguridad. Finalmente, una vez que fue alcanzado, lo retiraron de la cancha y continuó el partido con normalidad.
Vale destacar que estas incidencias no fueron las únicas que vivió la Pulga con los aficionados chinos. En su desembarco en el aeropuerto de Beijing, centenares de personas se acercaron con camisetas del elenco nacional y pancartas con la cara del rosarino. Y luego la situación se desbordó en el hotel. El público se agolpó en la entrada del edificio bajo el grito de “¡Messi!, ¡Messi!” e incluso lograron burlar la seguridad e ingresar al lobby en búsqueda de una foto o una firma.
La selección argentina ahora viajará a Yakarta para jugar un amistoso ante Indonesia, donde se agotaron las 77.000 entradas para el partido en apenas 5 minutos. No obstante, Lionel Messi se tomará un merecido descanso tras una temporada que lo vio llegar a la gloria eterna. “Tengo ganas de irme de vacaciones y después arrancaremos otra vez”, expresó tras el partido.
LAS FOTOS DE LA INVASIÓN DEL HINCHA POR MESSI