Se dará en enero y es para contratos que se firmaron entre los meses de noviembre de 2020 y de 2023. La herramienta para dicha actualización es el Índice de Contratos de Locación, cuya regulación recae en el Banco Central.
El mes próximo los inquilinos que deban ajustar el monto de su alquiler se encontrarán con una suba de 137,5% interanual.
En términos prácticos, esto se traduce en que un departamento de 3 ambientes, cuyo alquiler ascendía a $150.000 hasta diciembre, experimentará un incremento que lo situará en $356.250 hasta el año 2025.
Es para aquellos inquilinos que formalizaron contratos de alquiler residencial hace uno o dos años, los cuales están sujetos a actualizaciones anuales a través del Índice de Contratos de Locación (ICL). Se trata de acuerdos que continúan en vigencia hasta su fecha de vencimiento.
Aunque el presidente Javier Milei derogó la ley de 2020 mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (que aún no está vigente), es importante destacar que esta medida no tiene efectos retroactivos.
En consecuencia, los contratos vigentes seguirán ajustándose según el ICL. Solo aquellos contratos que hayan iniciado desde el jueves pasado serán eximidos de esta regulación y podrán ajustarse de acuerdo con lo acordado entre las partes. Sin embargo, esta situación podría cambiar en los próximos días, ya que la Comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo del Congreso evaluará el DNU y decidirá si lo aprueba en su forma original.
Sobre el aumento sin precedentes del 137,5% interanual para enero, Alejandro Braña, miembro del Colegio Profesional Inmobiliario porteño y especialista en Real Estate, explicó que “esta cifra extraordinaria se debe a la persistente escalada inflacionaria de los últimos tiempos. La disparidad entre los salarios, que no logran seguir el ritmo de la inflación, explica en gran medida esta situación”.
Cómo calcularlo
El cálculo del próximo monto de alquiler implica multiplicar la tarifa actual, vigente hasta diciembre, por el coeficiente correspondiente. Este coeficiente varía según la fecha en la que se actualice el contrato.
En cuanto a la aplicación del ajuste basado en el Índice de Contratos de Locación (ICL), los interesados pueden consultar el índice en la Web del Banco Central. La información se encuentra disponible bajo la pestaña “Estadísticas” y luego en “Principales variables”.
Además, otra alternativa para anticipar el aumento en el alquiler es utilizar la calculadora disponible en el portal del Colegio Profesional Inmobiliario (CPI) porteño, la cual se encuentra en su sitio web. También está la opción del Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC).
En los tres casos se debe colocar la fecha en la que se firmó el contrato, para saber cuál era el índice en ese momento; seleccionar la fecha de actualización del contrato e indicar el monto inicial del contrato.
Para realizar la consulta, el usuario debe elegir las fechas de inicio y finalización del período deseado. A modo de ejemplo, si un contrato para un departamento de 3 ambientes en CABA, con un monto actual de $150.000, vence el 31 de diciembre, el pago mensual se incrementará a $356.250 a partir del primer mes de 2024.
Diferencias
Aunque los contratos sujetos con el ajuste del ICL siguen siendo válidos, la derogación de la ley generó descontento entre las agrupaciones defensoras de locatarios.
Mauricio Retamar, representante de la Asociación Inquilinos Entrerrianos, destacó que el DNU aún no está en vigencia. “Consideramos que es ilegal y anticonstitucional. Estamos respondiendo activamente a consultas sobre contratos que se renuevan en diciembre. A nivel nacional, diversas agrupaciones de inquilinos presentaron demandas contra el DNU. Buscaremos proteger la legislación anterior, creemos que establece un equilibrio en la relación entre propietarios e inquilinos”, dijo.
En contraste, las cámaras inmobiliarias sostienen que la derogación brindará certidumbre. Virginia Manzotti, presidenta del Consejo Federal de Colegios Inmobiliarios de Argentina (Cofeci), afirmó: “La ley anterior no fue efectiva; la escasez de oferta y la retirada de viviendas para alquileres tradicionales fueron evidentes. Ahora observamos que varios propietarios en todo el país tienen la intención de volver a publicar sus inmuebles para contratos habitacionales de hasta 2 años de duración como máximo”.