Los efectivos del Centro de Reconocimiento y Control del Narcotráfico, junto con gendarmes del Escuadrón 59, estaban apostados en la zona donde se arrojaron numerosos bultos a tierra desde la aeronave, que continuó su vuelo hacia el oeste.
Un helicóptero de la fuerza de seguridad nacional voló tras la avioneta hasta que sus tripulantes dejaron de visualizarla, dado que al parecer realizó un aterrizaje de emergencia en jurisdicción de la ciudad de Monte Quemado, por lo que se realizaron rastrillajes aéreos y terrestres.
En forma paralela, los gendarmes cercaron el lugar donde habían sido arrojado los estupefacientes, en el que debían recogerlo personas que estaban apostadas en tierra y que forman parte de otro eslabón de la cadena del tráfico de drogas.
De ese modo, se interceptó a una camioneta con dos ocupantes, uno oriundo de Salta y otro de Chaco, quienes fueron aprehendidos y puestos a disposición del juez federal Guillermo Molinari.
Las fuentes precisaron que este secuestro, bautizado como Café Blanco, “constituye el más voluminoso en la historia de Santiago del Estero”, ya que el segundo en importancia se produjo en 1995, en una zona de salinas cercana a la ciudad de Frías, donde se halló una avioneta abandonada que transportaba una tonelada de cocaína.
En la misma línea se expresó el juez federal Molinari, quien se trasladó al lugar del operativo: “Es un secuestro histórico para la provincia de Santiago del Estero”, resaltó. Hasta el martes por la noche, trascendió que se contabilizaron 1.800 kilos de cocaína.
La modalidad de “bombardeo” de bultos llenos de cocaína y marihuana desde avionetas es una de las más frecuentes para ingresar los estupefacientes a suelo argentino desde Bolivia o Paraguay. En este caso, se estima que el destino final de la gran cantidad de cocaína era Buenos Aires y Córdoba.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, arribará este miércoles a Santiago del Estero para hacer el anuncio oficial del histórico golpe al narcotráfico en esa provincia.
Mientras tanto, continúa la intensa búsqueda de la avioneta que arrojó las casi dos toneladas de cocaína. Las fuerzas de seguridad se dedican por estas horas a recorrer por tierra y aire los campos y caminos del interior de la provincia.
Con información de Nuevo Diario y DyN