Estaba internado en Fundaleu. Su hija había venido a verlo y retrasó su vuelta a Europa a raíz de su delicado estado de salud.
Jorge Zorreguieta, el padre de la reina Máxima de Holanda, murió esta tarde a las 16.30 en un sanatorio porteño donde estaba internado internado desde hace una semana. El empresario y ex funcionario durante la última dictadura militar peleaba desde hace cerca de 20 años contra un linfoma no Hodgkin.
Máxima Zorreguieta, el fin de semana, cuando pasó por Fundaleu.
El parte médico en el que se confirma su deceso, firmado por el director médico de Fundaleu, Miguel A. Pavlosky, dice: “Se comunica que en el día de la fecha, siendo las 16.30, falleció en FUNDALEU, el señor Jorge Zorreguieta como consecuencia de una linfoma complicado con una infección respiratoria”.
El parte médico
El parte médico que comunica la muerte de Jorge Zorreguieta.
Zorreguieta se encontraba en grave estado desde hace varias semanas. Intentaba recuperarse de “una infección pulmonar para recibir atención médica de enfermería y antibióticos endovenosos”, según explicó el último parte médico difundido en la noche del lunes por Fundaleu.
Por ese motivo, Máxima había realizado un viaje relámpago este fin de semana a su país para visitar a su padre.
La reina de Holanda, de 46 años, había llegado el sábado pasado a Buenos Aires y fue fotografiada saliendo de Fundaleu.
En un principio, Máxima tenía planeado volver a Europa este lunes, pero decidió quedarse para no despegarse de sus seres queridos en este momento tan tormentoso.
De hecho, desde que Máxima pisó suelo argentino no hizo más que visitar a su padre y acompañar a sus hermanos menores, Martín, Juan e Inés, así como a sus hermanas mayores, María, Ángeles y Dolores, fruto de un matrimonio anterior de su padre.
En 2001, Máxima se comprometió con Guillermo Alejandro de Holanda, con quien tiene tres hijas: Amalia, Alejandra y Ariadna, de 13, 12 y 10 años, respectivamente. Es reina consorte de los Países Bajos desde el 30 de abril de 2013.