El avión, un British Aerospace 146 para trayectos cortos operado por la aerolínea boliviana LaMia, donde viajaban los jugadores del club brasilero Chapecoense, declaró una emergencia de la aeronave, que partió desde Santa Cruz, Bolivia. “Lo que iba ser una fiesta terminó siendo una tragedia”, dijo el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, desde el centro de mando de la operación de búsqueda y rescate.
En un breve comunicado publicado en su página de Facebook, el club dijo: `”Que Dios esté con nuestros atletas, dirigentes, periodistas y demás invitados que están con la delegación”.
Elkin Ospina, alcalde de La Ceja, una localidad próxima a la zona del siniestro, explicó que los rescatistas que trabajaron durante la noche se animaron tras sacar a tres pasajeros con vida de entre los escombros. Autoridades y rescatistas fueron alertados de inmediato, pero un helicóptero de la fuerza aérea tuvo que regresar por la escasa visibilidad. Las fuertes precipitaciones en la zona complican la búsqueda nocturna y se pidió a periodistas que se mantuvieran alejados de la zonadel choque y de las carreteras para facilitar el acceso de ambulancias y equipos de emergencia.