El fiscal Taiano abrió una causa por los viajes al exterior y el aumento del personal del organismo. También por el alquiler de un perro y los derechos de canciones de Sandro para publicidades. Además de pasajes al festival de Cannes, en Francia, con el objetivo de Fabricaciones de Militares de obtener conocimientos sobre la producción audiovisual.
El ex titular de la Dirección General de Fabricaciones Militares (DGFM) Santiago Rodríguez y su pareja y ex funcionaria de ese organismo, Bárbara María Grané, fueron imputados por presunta defraudación a la administración pública en gastos exorbitantes e innecesarios.
Fuentes judiciales informaron que el fiscal federal Eduardo Taiano imputó a Rodríguez y a Grané, quien estaba a cargo del área de comunicación, y así abrió formalmente una investigación para lo cual le solicitó al juez Julián Ercolini las primeras medidas de prueba.
La causa es por distintos gastos que entre 2011 y 2015 se hicieron en Fabricaciones Militares y que fueron revelados, entre otros medios y blogs. A instancias de esas publicaciones el fiscal Guillermo Marijuan inició una investigación preliminar y presentó la denuncia.
Entre los gastos están la compra de un drone por 88.500 pesos; el alquiler de un perro por seis mil pesos para una publicidad sobre nuevos radares; un millón de pesos en cámaras de video, de fotos, lentes y distintos sistemas tecnológicos; los pagos por derecho de autor de dos canciones (88.100 por “Porque yo te amo” de Sandro, y 22.900 por “Radar” de Drago Alem y Schaff Heber) para publicidades.
También se investiga el pago de seis pasajes de avión y la estadía en el festival de cine de 2013 Cannes, en Francia, con el objetivo de Fabricaciones de Militares de obtener conocimientos sobre la producción audiovisual.
La imputación también es para determinar si hubo delito en el pago de viajes entre 2011 y 2015 por 876.603,56 dólares y la contratación entre 2013 y 2015 de 1.151 nuevos empleados contratados. En el área a cargo de Grané la planta pasó de cuatro a 40 integrantes.
El fiscal Taiano pidió, como medidas de prueba, copia de los balances contables de Fabricaciones Militares de 2011 a 2015; la declaración de empleados del organismo; una pericia sobre los equipos tecnológicos que se compraron y que se informe dónde se encuentran.