Consultoras estiman para el segundo mes del año una inflación similar a la de enero. Y advierten por presiones que impulsarán los precios en marzo.
Febrero cerró con una inflación similar a la de enero, en torno al 6%, según los relevamientos realizados por distintas consultoras privadas. En un mes habitualmente “tranquilo”, la suba en los alimentos traccionó al alza los distintos indicadores. Y, advierten los analistas, quedó un piso muy alto para marzo: algo que, sumado a distintos factores estacionales, sumaría presión al dato del IPC.
Si bien las cifras varían según cada consultora, sobre todo a raíz de la composición de las canastas relevadas, en todos los casos se percibe que la división “alimentos” subió en febrero por encima del nivel general de inflación. La suba de la carne, coinciden, empujó al alza el rubro con mayor incidencia dentro del Índice de Precios al Consumidor.
Por caso, el IPC de la consultora Orlando Ferreres registró una variación en febrero de 6,4% mensual (la medición de la firma en enero había arrojado una inflación de 5,2%) y registró un crecimiento interanual de 101,5%.
“En cuanto a los principales rubros, ‘Alimentos y bebidas’ y ‘Salud’ encabezaron las subas del mes, registrando alzas mensuales de 9,0% y 7,7% respectivamente, seguidos por ‘Esparcimiento’ y ‘Transporte y comunicaciones’, que presentaron una variación de 6,8% y 5,5% respectivamente”, señalaron desde la consultora, y detallaron que “la medición núcleo, por su parte, arrojó una variación de 6,7%”.
Por su parte, el relevamiento de precios minoristas de C&T para el Gran Buenos Aires, presentó un incremento mensual de 6,2% en febrero, por debajo del 6,4% que había tenido en enero, pero “muy por encima del 4,1% de febrero del 2022”. “Si el IPC del INDEC arrojara 6,2%, la inflación oficial rondará el 101,7% a nivel nacional, alcanzando los tres dígitos por primera vez desde octubre de 1991”, proyectaron desde la firma.
“Febrero suele ser un mes de inflación relativamente baja, pero no fue así este año. En gran medida, este comportamiento anormal se debió a la suba de 9,2% que tuvo el rubro de alimentos y bebidas, el de mayor ponderación. En líneas generales hubo una aceleración de todos sus principales componentes, pero el aspecto más destacado fue el aumento de 20% en la carne, proceso que ya se había iniciado en enero y que se acentuó en febrero”, detallaron desde C&T.
Agregaron que “esta dinámica tiene como consecuencia un efecto de arrastre estadístico muy importante para marzo, que para los alimentos y bebidas es de 3,5% y para el IPC total se ubica cerca del 1,5%, lo que potenciará los aumentos que suelen darse en ese mes y los ya anunciados en diversos rubros regulados”.
Por su parte, desde la Fundación Libertad y Progreso señalaron que el IPC que relevan tuvo un avance mensual de 5,7% en febrero (en enero, su sondeo había dado 6,3%). “Se presentó una leve desaceleración (0,3 puntos porcentuales) respecto al dato de enero. A pesar de esto, la variación interanual alcanzó los tres dígitos y se ubicó en 100,7%, superando el 98,8% de enero”, estimaron desde la firma.
Y coincidieron que el rubro “con mayor aumento e incidencia en el índice fue ‘Alimentos y Bebidas no Alcohólicas’, registrando una variación mensual de 9,8% y una incidencia de 2,3pp. Además de ser el que más aumento en el mes, también es el que mayor ponderación tiene en el IPC (23%) por su relevancia en el consumo de los argentinos”.
Presión para marzo
Una inflación cercana al 6% en febrero dejaría un piso y una inercia elevada para marzo. De hecho, según remarcaron desde Libertad y Progreso, para el tercer mes del año esperan “que el índice presente una marcada aceleración respecto a febrero, dada la conjunción de dos efectos”. “En primer lugar, el componente estacional implica una mayor presión sobre la inflación, motivada por el inicio de actividades tales como el ciclo lectivo y su consecuente consumo. Por otro lado, se prevé una serie de aumentos en los precios regulados que empujarán al alza el IPC general, entre los que se destacan: colegios privados, nafta, transporte público, alquileres, prepagas y tarifas de luz, gas y agua”, destacaron.
Desde Fundación Capital, por su parte, prevén que la inflación de febrero “termine en torno al 6% mensual, consolidando un piso similar al de enero”. “Adicionalmente, el mes de marzo podría marcar un registro incluso mayor, en torno al 6,5% mensual, en línea con aumentos típicos del mes asociados al comienzo del ciclo lectivo y de la temporada de otoño/invierno en vestimenta y calzado”, resaltaron.
“Aún más, dos tercios de los hogares recibirán una actualización en la tarifa de gas, de entre 40% y 50% dependiendo del ingreso del hogar (excepto los beneficiarios de tarifa social que no tendrán subas), lo que añadiría medio punto al registro de inflación del mes. Además, los grandes usuarios de comercios e industrias tendrán incrementos en torno al 70% que, si bien no impactarán directamente en el IPC, lo harán de forma indirecta a través de los mayores costos que se trasladarán a precios finales”, concluyeron.