Por Javier Pizarro* para Diario Cuarto Poder | El vicegobernador Osvaldo Jaldo, se convirtió en el socio político de tiempos difíciles para el gobernador Juan Manzur. La compleja relación con la nación y el constante ataque de los referentes de Cambiemos en la provincia motivó que no llegarán recursos para la realización de grandes obras. El escenario se modifica con la llegada de Alberto Fernández a la Presidencia.
Un compañero de ruta
Siempre que se emprenden grandes desafíos se necesita de alguien que sepa interpretar y sentir del mismo modo el compromiso de una gran misión.
Así lo entendieron el gobernador Juan Manzur, y el vicegobernador Osvaldo Jaldo, desde que compartieron fórmula en las elecciones de 2015.
Juntos afrontaron desde el inicio, esas infundadas denuncias de fraude, que jamás pudieron comprobarse y que terminaron beneficiando a la campaña nacional de un prometedor Mauricio Macri.
Trabajo conjunto y coordinado
Se podría decir que esa adversidad inicial les dio el músculo y el entendimiento de que debían trabajar siempre en conjunto, complementando las características distintas de temperamento. Juan Manzur, el de indescifrable expresión y siempre conciliador. Osvaldo Jaldo, el de firme temperamento y de no esquivar la pelea.
Esa combinación logró lo que muchos no podrían haber alcanzado: transformarse en las máximas autoridades partidarias, gestionar una provincia prolija y sin endeudamiento y posibilitar un segundo mandato repitiendo fórmula pese a las muchas apetencias y ambiciones de otros dirigentes.
Entre esas ambiciones tuvieron que lidiar con el intento de regreso del ex gobernador y actual senador, quien terminó fuera del partido y sin posibilidad de regreso al “Sillón de Lucas Córdoba”.
El espadachín de Manzur
En esa pulseada, Jaldo se transformó en el espadachín. Lo mismo ocurrió con todos los ataques que le quisieron hacer a Manzur, quien gozó de ese compañero de ruta tan leal.
La gratitud de Manzur fue expresada en el acto de asunción en el Teatro Mercedes Sosa, y estuvieron de testigos nada menos que el presidente electo, Alberto Fernández, y la dirigencia nacional y local a pleno.
Jaldo también se mostró agradecido y expresó: “Manzur tomó el timón de la provincia y nos llevó por el camino correcto”.
Con respecto al propio acto, el vicegobernador sostuvo que “va quedar grabado en la memoria de todos los tucumanos porque el domingo pasado los argentinos eligieron un presidente que va a gobernar la República Argentina. Y ese presidente hizo su primera salida al interior, a Tucumán”.
Jaldo subrayó en lo difícil que fueron los cuatro años con gobierno nacional en contra, pero eso no será problema en esta gestión.