En cumplimiento con el contrato de concesión de la obra y los procedimientos de las normas que regulan este tipo de trabajo en diques, se lleva a cabo una auditoría independiente que está a cargo del ingeniero Dr. Roger Bremen.
El vicegobernador, Osvaldo Jaldo, junto al ministro de Obras y Servicios Públicos, Fabián Soria, y miembros del Consejo Técnico Nacional del Organismo Regulador de Seguridad de Presas (ORSEP), supervisó las obras que se llevan adelante en la presa N° 3 en el dique Celestino Gelsi El Cadillal con el fin de interiorizarse sobre el desarrollo de los trabajos desarrollados en el principal espejo de agua de Tucumán.
La visita se concretó con motivo de que se lleva a cabo una auditoría independiente que está a cargo del ingeniero Dr. Roger Bremen. Actividad de rutina prevista en el contrato de concesión. La auditoría abarca al estudio de la presa lateral n°3 e incluye a todo el complejo de obras de El Cadillal y del Pueblo Viejo. Bremen es consultor externo independiente. Efectúa tareas de evaluación de la seguridad de la presa en las condiciones que establece el contrato de concesión y cuenta con la aprobación del ORSEP. Cuando la Secretaria de Energía autorizó la ejecución de las obras, solicitó que estas sean sometidas a auditoría.
Jaldo declaró: “estamos trabajando en la prensa 3 para ir contrarrestando las filtraciones que tiene el dique. Hoy tenemos inspecciones provinciales y nacionales. Están todos los técnicos que tienen la responsabilidad del contralor de la ejecución de los trabajos que acá se están realizando. Control provincial, nacional y del sector privado como así lo exige la reglamentación del mantenimiento de las presas de la República Argentina”.
Añadió: “vemos que están surgiendo algunos imprevistos que suponíamos que podían aparecer y que es normal que surjan. La empresa que está trabajando traerá más equipamiento, entre ellas más máquinas que inyectan cemento líquido, para ampliar la capacidad de trabajo para cumplir con los plazos previstos”.
En ese sentido dijo que los técnicos tomarán estas decisiones con el contralor del ORSEP y del Ministerio de Obras Públicas: “Por eso los vine acompañar para que me hagan un informe para saber en qué situación estamos como Gobierno de la provincia y en qué estado está la obra”.
El Vicegobernador también dijo que El Cadillal está en una cota de 604, “con lo que se puede abastecer de agua a los tucumanos y a los ingenios que recién están empezando la zafra. Venimos de un año seco. En el norte de la provincia y sur de Salta no llovió lo necesario. Por eso tenemos que tener una administración muy responsable del agua de este dique. Hoy no está sobrando el agua, tenemos el agua necesaria. Por eso hay que tener una administración equitativa y con una muy buena distribución”.
Soria declaró: “Hace dos semanas tuvimos un primer control con una auditoría interna. Hoy se lleva adelante la auditoría nacional que tiene un informe preliminar. Sabemos cómo se viene trabajando. Tenemos la tranquilidad de que el nivel de agua del dique es el necesario para que no falte el agua. Es importante hacer un uso racional del líquido. Esperamos que, como hubo el año pasado, se produzcan lluvias fuertes en mayo para que el dique puede cargar. Hay faltante de agua en los ríos del norte. Necesitamos que tenga agua el espejo a medida que se va inyectando este cemento para que sea más eficiente”.
El ingeniero civil, Oscar Vardé, especialista en mecánica de suelos y rocas, fundaciones y presas, jefe de Inspección de Obra por la provincia, explicó en cuanto a las deficiencias registradas “son niveles de filtración que no esperábamos durante la ejecución de varios sondeos. Nosotros, cuando hicimos estos tratamientos, fundamentalmente, lo que se suponía que íbamos a tratar era el contacto entre la presa y la fundación de roca, donde había niveles de yeso detectados. Que iban a ser los lugares donde se producen las pérdidas de agua” y dijo que se detectaron otros puntos permeables, detectados en algunas perforaciones, probablemente ligados a vicios de construcción por contaminación de materiales.
“Hubo que inyectar inesperadamente en varios sondeos. Cada nivel se fue solucionando pero implicó una demora porque hubo que cementar y esperar que esa mezcla endurezca para continuar. Son improvistos que estamos afrontando y superando en este estribo. Que llevan a la necesidad de tener más equipamiento porque no sabemos si esta situación se dará en el resto de la prensa, en el valle y en el otro estribo. Esto amerita una readecuación logística”, detalló.
Y concluyó: “Nuestra experiencia indica que las prensas laterales en realidad son obras que no tienen el mismo control de calidad que la presa principal. Esto ocurrió aquí también. No es que la prensa esté mal, ni se vaya a caer, ni haya nada catastrófico. Hay capas que no deberían estar en ese lugar y están. Esta es la realidad” y dijo que avance de la obra “va a estar dentro de los plazos lógicos con más equipamiento. Lo que hay que hacer es indispensable. Son inyecciones que se deben realizar en este momento. Es positivo y muy importuno iniciar la obra en este momento, con el nivel de riesgo detectado a tiempo”.