Aquellos que supieron adularlo sumidos en una obsecuencia ilimitada, ahora le dan la espalda para apoyar la fórmula Manzur-Jaldo para el 2019. La amenaza de Alperovich de salir por fuera del PJ se diluye a medida que pasan los días y los distintos referentes oficializan el apoyo para quienes forman el binomio gobernante.
El senador no tiene quien le escriba. Supo ser durante 12 años el amo y señor de la provincia. Manejó con puño de hierro y disciplinó a la “tropa” con gran dureza, ajustando en las partidas presupuestarias a los que se “portaban mal” y beneficiando a quienes eran leales a sus convicciones. José Alperovich capitalizó su poder económico en político y después los hizo viceversa. El año próximo tendrán lugar las elecciones para gobernador en nuestra provincia y el ex mandatario sueña con formar parte de la dupla dentro del Partido Justicialista (PJ), pero Juan Manzur y Osvaldo Jaldo quieren repetir y esto deja afuera al ex radical.
Luego de que el Gobernador afirmara que en 2019 apostará a repetir la fórmula para la gobernación junto a Jaldo, el alperovichismo perdió una pieza de su esquema de dirigentes: el legislador Guillermo Gassenbauer. “De José (Alperovich) siempre voy a ser un agradecido y le tengo un gran respeto y un gran cariño. Pero también soy político y hoy estoy apoyando a la fórmula Manzur-Jaldo, que está llevando bien Tucumán. Creo que José fue un gran gobernador y que el tiempo se va a ocupar de ponerlo en el lugar que corresponde”, dijo Gassenbauer.
El legislador, ex secretario privado de Alperovich e hijo de Jorge Gassenbauer, la mano derecha del senador, confirmó que se inscribe en el bando del gobernador Manzur. Adelantó que desea ser candidato a intendente por la Capital, para arrebatarle San Miguel de Tucumán al jefe municipal Germán Alfaro (Cambiemos). “Trabajo todos los días para eso”, planteó.
“Alperovich está dentro del peronismo, es una persona sensata que va a priorizar el grupo y no lo personal”, cerró Gassenbauer.
Alperovich había levantado revuelo dentro del peronismo local cuando aseguró que si no se presentaba a gobernador en 2019 junto a Manzur optaría por presentarse por separado, inclusive fuera del PJ. Manzur y Jaldo respondieron ni lerdos ni perezosos que el binomio cerró filas de cara a 2019 y aseguró que no proscribirá a nadie. Las declaraciones de Juan Manzur fueron claras y contundentes: “Sí, si venimos trabajando juntos, es lo normal (que se repita la fórmula). Es lo normal, es lo lógico, pero hoy estamos en un momento difícil y trabajamos a destajo para cuidar a Tucumán. Vamos a privilegiar la cuestión y seguiremos trabajando con la aspiración de que (nuestra tarea) exceda al 2019”.
Otro de los hombres fuertes del alperovichismo, Armando Cortalezzi, que creció de la mano de José, ahora dice que hará todo lo que le diga Manzur, y por ende, Jaldo. Quizás presagiando una derrota de su antiguo líder político en las elecciones del año próximo.
La secretaria de Gobierno, Carolina Vargas Aignasse, prefiere dejar los pies en el plato dentro de la actual gestión y no arriesgarse
El ministro del Interior, Miguel Acevedo y el de Gobierno, Regino Amado parecen más alineados con Manzur-Jaldo que con Alperovich.
Los 93 delegados comunales y muchos intendentes que hicieron las pintadas Manzur-Jaldo 2019, como se les pidió en una reunión presidida por la fórmula Gobernante.
Los paladares negros
Al parecer los únicos que le quedan a José, son los legisladores Marcelo Ditinis, Julio Silman y Silvia Rojkés y hasta por ahí nomás. Además de su esposa Beatriz Rojkés, quien hasta marzo presidirá el partido.
En ese contexto está complicado el regreso a la Gobernación de José Alperovich, tanto dentro como fuera del PJ.
Dentro del concejo capitalino, el bloque Tucumán Crece-PJ cuenta con siete integrantes, y tiene tres alperovichistas: David Mizrahi, Dante Loza y Juan Luis Pérez.
“Lo que se planteó fueron las opiniones de los líderes políticos que hay en el peronismo. Por supuesto que todos tienen derecho a presentarse a gobernador, pero estamos lejos para hacer algún tipo de apreciación sobre quién debe ser candidato a la gobernación. Todos nacimos de un movimiento político que comenzó en 2003”, fue la respuesta de Pérez cuando se le consultó si había optado por algún bando. Consultados al respecto, Loza y Mizrahi optaron por no realizar declaraciones.
José María Franco, de la bancada Restauración Peronista, también forma parte de la oposición a Alfaro. “Me parece que hay temas más urgentes que definir las candidaturas: el estado de las calles, los basurales, las obras prometidas y cómo gastó Alfaro el presupuesto del año pasado”, consideró el peronista. La postura de Javier Aybar parece más peculiar (ver recuadro aparte).
Lo que queda más que claro dentro de este análisis es que gran parte de intendentes, delegados comunales y demás funcionarios están más cómodos ahora que durante los 12 años que José Alperovich marco el rumbo de la provincia y muchos aseguran que “no quieren tener la suela en el cuello” de nuevo.
El final de la demagogia de una clase política que nunca entendió y mucho menos sintió empatía por las necesidades de la gente está llegando definitivamente a su fin y al igual de Julio Miranda, seguramente Alperovich optará por los fueros parlamentarios y terminará en los “cuarteles de invierno” quizás preguntándose porqué no supo o no quiso poner su nombre en el bronce, ya sólo quedan pintadas en sucias paredes que el olvido se encargará de borrar.
Aybar, el concejal que quiere quedar bien con Dios y con el diablo
En lo que hace a los posicionamientos, el concejal justicialista Javier Aybar, electo por el Frente para la Victoria (FpV) pero aliado a Germán Alfaro, sentó una posición particular: “al que más le creo, a pesar de que nunca tomé un café con él, es a Alperovich. Todos son de doble filo, no dicen la verdad. Ahora al fin se destapó la olla. Si es candidato a gobernador el compañero Osvaldo Jaldo, lo apoyo. Si es Alperovich el candidato, iré con José. Para no quedar mal, adelanto que también acompañaré a Alfaro como intendente en 2019″. Esto pone en manifiesto que la “cintura política” de Aybar da para todos los ritmos y cambios….