Maximiliano Castano, actual jugador de Liniers, equipo que milita en la D, jugó en una docena de clubes y pasó por las cinco categorías del fútbol argentino, en sus 39 años. Cumpliendo una marca que pocos jugadores consiguieron.
Maxi comenzó su sueño en las Inferiores de Liniers. Desde 1996. que debutó en Primera División con Huracán, pasó por All Boys, Quilmes, Almirante Brown de Arrecifes, San Martín de Mendoza, Almagro (consiguió en 2004 el ascenso a la máxima categoría), Instituto y Chacarita, cuando ambos estaban en la B Nacional. En 2007 emigró a Universidad Católica de Ecuador (su única vez en el exterior). Ferro, Platense, Los Andes y Almagro, ya en la Primera B. Hoy se encuentra en Liniers club en el que descendió de la C a la D.
-¿Cuál fue el club que más te marcó?
-Sin duda, Almagro. Ahí viví los momentos más lindos de mi carrera y fue el club donde más tiempo estuve. Más allá de eso no me olvido de ninguno.
-¿Podrás contarme los pro y los contra de las 5 categorías en las que jugaste?
-A medida que vas subiendo categorías, hay más pro que contra. Debuté en Huracán en Primera y luego estuve muchos años en la B Nacional. Y una vez que ganás un nombre (sic), como en mi caso, uno se siente cómodo en la categoría. A mi me daba un poco de incertidumbre pensar cómo sería jugar en primera y cuando ascendí con Almagro me di cuenta que no era muy diferente. Al contrario, hay canchas más lindas, más repercusión. En las categorías menores aparecen problemas y hay menos recursos económicos. Cuando a uno le toca jugar en estas divisionales le da más valor a todo. Y más valor tienen los chicos, que por un viático se entrenan y, además, trabajan. No te das cuenta cuando no te toca estar cerca.
-¿Cuál fue la cancha más difícil en la que estuviste?
-Por su estado, son las que juego ahora. Por ambiente, pude jugar en la cancha de Boca y no se compara con ninguna. Otra cancha difícil era la vieja de Estudiantes, la gente estaba muy cerca. Y la de San Martín de Tucumán, que es una donde llevan mucha gente.
-¿Qué es lo que te motiva a seguir jugando?
-La pasión que uno pone. Es lo que te hace levantar de cada partido perdido, también de este descenso que nos tocó ahora. No quiero retirarme con un descenso si tengo la posibilidad de levantarme. Por suerte el físico me acompaña y puedo seguir haciendo lo que me gusta no importa la categoría, eso es lo que me motiva.
Fuente: Clarín