Las hermanas Mercado quedaron contra las cuerdas. Se esperaba que sus testimonios echaran luz en el juicio por Paulina Lebbos; sin embargo, sus declaraciones estuvieron llenas de contradicciones y generaron más dudas que certezas en los jueces.
Esta mañana le tocó declarar a Jimena Mercado, quien estuvo en la noche del 26 de febrero de 2016 junto a su hermana Virginia, y a Paulina. El tribunal le hizo cinco preguntas, y en cuatro de ellas detectaron contradicciones. Es por ello que los magistrados Carlos Caramuti, Dante Ibáñez y Rafael Macoritto enviaron a Jimena a la sala de testigos para que recapacite y para que haga un esfuerzo para recordar lo que ocurrió aquella noche.
Cuando la testigo se retiraba, el fiscal Carlos Saltor anunció que va a pedir que se investigue a Jimena Mercado por falso testimonio. La misma postura tomó el abogado Gustavo Carlino, defensor del ex subjefe de Policía, Nicolás Barrera, pero además adelantó que solicitará un careo entre las hermanas Mercado.
“Estamos ante una testigo hostil, que aparentemente se escuda en el ‘no recuerdo’ para no decir la verdad. Algo similar hizo su hermana ayer”, argumentó Carlino.
En la jornada de ayer, Virginia Mercado declaró como testigo por el homicidio de su amiga, ocurrido hace 12 años. Su testimonio, sin embargo, no fue muy creíble ya que estuvo cargado de contradicciones. Los jueces anotaron todos los errores que cometió durante toda la jornada.
En la sala se percibió que no falta mucho para que Mercado sea procesada por su declaración. La mayoría de las partes están seguras que no dijo todo lo que sabe y que podría ser acusada de falso testimonio.
“No recuerdo” fueron las palabras que sistemáticamente utilizó la salteña a la hora de contestar las preguntas más importantes que le hicieron, al punto que el juez Ibáñez le pidió que se esforzara y que contestara con exactitud. “No se arruine la vida”, le recomendó.
Virginia Mercado actualmente tiene 40 años, dos hijos y trabaja como docente en la localidad salteña de Aguaray. A lo largo del interrogatorio que realizó el ministerio Público Fiscal, la querella y los defensores, la testigo cayó en varias contracciones respecto a sus declaraciones anteriores.
Está previsto que hoy también declare Alejandro Aramayo, primo de Virgini que vivía con la salteña y que también fue a bailar con la estudiante de Comunicación Social.
fuente: la gaceta