Lo informaron horas antes de que cerrara el plazo. Se había quedado con $ 8.000 millones que iban al Estado.
El 30 de marzo, a pocas horas de que se cerrara el plazo de la moratoria fiscal, la AFIP le informó a Oil Combustible, la empresa de Cristóbal López que adeuda $ 8.000 millones en impuestos, que podrá acogerse a ese beneficio. El privilegio había sido denegado en noviembre del año pasado cuando creían que López iba a ser procesado por defraudación a la administración pública por la deuda impositiva. Además de Oil, también ingresó al régimen de regularización de deuda el Grupo Indalo que pagará unos $ 57 millones por mes. Recién cuando se homologue el concurso de acreedores de Oil, el empresario K comenzará a pagar la deuda millonaria que tiene con el Estado esa compañía petrolera. La idea de López es reducir gran parte de la deuda en un solo pago: planea vender activos de la empresa por 280 millones de dólares a un trader suizo.
El cambio de estrategia de la AFIP -que había denunciado en la Justicia federal a López por defraudación al Estado- es llamativo. Pero en parte hace juego con la zigzagueante relación que el Gobierno de Cambiemos mantiene con López. Por un lado la Dirección Nacional de Vialidad (DNV) está decidida en rescindirle el contrato millonario de la Autopista Riccheri y en paralelo López ganó una obra pública por más de $ 1.600 millones en el Sur. En el Grupo Indalo creen que con el flujo de fondos que reciben más la venta de activos, en menos dos años cancelarán sus deudas y podrían resolver el frente judicial.
Oil Combustibles es investigada por la AFIP por la deuda de $ 8.000 millones. Foto Pedro Lázaro Fernández.
En noviembre pasado, la AFIP le había denegado el ingreso a la moratoria porque creía que el juez Julián Ercolini iba a procesar al empresario K por “defraudación contra la administración pública”, por la deuda de $ 8.000 millones generada con el fisco durante el último gobierno de Cristina Kirchner, al no pagar el Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC) y financiar sus empresas con ese dinero.
Pero la causa finalmente pasó al fuero Penal Económico después que Ercolini se declaró incompetente porque consideraba que estaba frente a un fraude fiscal. Con esa decisión judicial, el camino comenzó a allanarse para que el empresario K comience a resolver su situación con la AFIP. “López estaba a derecho porque ya había hecho la reserva para ingresar a la moratoria, con la causa en lo penal económico y al no ser procesado no hay impedimento legal para que pueda ingresar”, dijeron desde el Gobierno al explicar el repentino cambio.
Cristóbal López este año en los Tribunales de Comodoro Py, cuando fue a declarar en la causa Los Sauces SA. Foto Pedro Lázaro Fernández.
Lo que López y su socio Fabián de Sousa buscan con el régimen fiscal para Oil, generadora de la deuda millonaria con el Estado, es en dos años cancelar todo. La ayuda principal, es proporcionada por el trader Suizo Gunvor, interesada en adquirir parte de los activos de Oil Combustibles correspondientes al puerto de San Lorenzo, donde según pudo saber Clarín, pretenden realizar un plan multi propósito que incluiría desde combustible hasta cereales. La venta se cerraría en 280 millones de dólares (unos $ 7.000 millones) destinados a saldar la deuda con la AFIP. Los $ 1.000 millones restantes son los que ingresarían al plan de 60 cuotas que contempla la moratoria
Fabián De Sousa, socio y mano derecha de Cristóba López, ambos procesados por asociación ilícita. Foto Alfredo Martínez.
En marzo se venció el primer plazo impuesto por la firma suiza para cerrar el acuerdo con la empresa de López, pero como todo está en manos de la Justicia, se amplió el período hasta septiembre. “Se pidió permiso para poner fin al concurso y que se autorice la venta de parte de Oil”, dijo una fuente de Indalo.
La AFIP también autorizó al Grupo Indalo a ingresar a la moratoria a fines de marzo. En la actualidad pagan unos $ 57 millones mensuales de cuota, la mayor deuda la tienen los medios de comunicación por unos $ 20 millones.
En 2003. Cristóbal López con Néstor y Cristina Kirchner en el casino de Río Gallegos.
Con las cuentas embargas y una inhibición general de bienes, el empresario K igual no tuvo impedimento para seguir obteniendo ingresos. La constructora CPC es una de sus principales apuestas, obtuvo del actual Gobierno un contrato por $ 1.600 millones que fue rescindido a Lázaro Báez. Además, ganaron la licitación de una línea eléctrica que va desde Caleta Olivia a Pico Truncado (Santa Cruz), por $ 300 millones. La empresa tiene 14 obras en todo el país para ejecutar durante los próximos cuatro años que demandarán unos $ 20.000 millones.
“No es como Lázaro, CPC es una empresa que trabaja desde hace muchos años, antes que la comprara López y las obras que hoy por hoy gana, lo hace siguiendo las reglas. Se hicieron todos los estudios correspondientes y los pedidos a AFIP”, consignaron fuentes oficiales.
Autopista Ezeiza-Cañuelas, concesión que tiene Cristóbal López y que perderá en breve. Foto Maxi Failla.
En este toma y daca, CPC es dueña de Esluvial SA concesionaria de la Autopista Riccheri Ezeiza – Cañuelas, contrato que la DNV está pronto a rescindir por una deuda de $ 500 millones y diversos incumplimientos. El Grupo Indalo exigirá una indemnización de $ 4.100 millones.
Un situación similar corre para los medios de comunicación. Pese a que De Sousa quedó procesado por retención indebida de aportes previsionales de los trabajadores de Ámbito Financiero, perciben un promedio mensual de pauta oficial de $ 8 millones. “No podemos no cumplir la ley”, señalan desde el gobierno.