Lo dijo el ex alcalde de Londres, el laborista Ken Livingstone, apodado “Ken El Rojo”. “Había 200 familias que controlaban el 80% de la riqueza. Les permitió seguir viviendo”, señaló.
El ex alcalde de Londres, el laborista Ken Livingstone, sugirió este jueves que una de las causas de la crisis en Venezuela es que Hugo Chávez “no mató a todos los oligarcas”.
Apodado “Ken El Rojo”, Livingstone, de 72 años, fue alcalde de la capital británica entre 2000 y 2008 y está suspendido de militancia en el Partido Laborista hasta que concluya una investigación sobre unas declaraciones en las que afirmó que Adolf Hitler era sionista.
El fallecido Chávez, presidente entre 1999 y 2013, “no mató a todos los oligarcas. Había 200 familias que controlaban el 80% de la riqueza. Les permitió seguir viviendo”, explicó Livingstone en una entrevista con la emisora talkRADIO.
“Sospecho que muchos están usando su poder y su control sobre las importaciones y las exportaciones, las medicinas y la comida, para ponérselo difícil y debilitar a (Nicolás) Maduro”, el sucesor de Chávez.
Cuando la entrevistadora le preguntó si estaba defendiendo el asesinato de esas personas, Livingstone respondió: “no estoy a favor de matar a nadie”, antes de insistir que si Chávez los hubiera matado “no tendrían la posibilidad de debilitar al actual gobierno”.
En la entrevista, el político estimó también que Estados Unidos podría estar tras la crisis venezolana y que el gobierno de Maduro “no es una dictadura”.
A demanda de la AFP, el Partido Laborista no quiso comentar las declaraciones de Livingstone, pero una fuente hizo hincapié en que no es dirigente de la formación y no habla en su nombre.
El líder laborista Jeremy Corbyn, gran defensor en su momento de Hugo Chávez, no ha hablado públicamente de Venezuela desde junio de 2015.
La fuente laborista explicó que el líder está de vacaciones y remitió a un comunicado publicado esta semana por la portavoz de Relaciones Exteriores del partido, Liz McInnes, pidiendo al gobierno de Maduro que proteja los derechos humanos, la libertad de expresión y el Estado de derecho.
“El presidente Maduro tiene además que responder personalmente a las inquietudes legítimas de la comunidad internacional sobre la naturaleza cada vez más autoritaria de su gobierno y las crecientes penurias de su pueblo”, afirmó el comunicado.
Fuente: Clarín