A un año de la denuncia realizada por su propia sobrina (la víctima), la causa por violación contra José Alperovich avanza a paso lento y tiene pocas definiciones. Como hay dos acusaciones -una en Tucumán y otra en la ciudad de Buenos Aires-, la Corte Suprema debe definir qué juzgado tendrá competencia en el caso.
Hace poco más de un año, el 22 de noviembre de 2019, la provincia de Tucumán se vio sacudida por una denuncia contra el senador José Alperovich por abuso sexual agravado en perjuicio de una sobrina segunda del ex gobernador tucumano. Y el escándalo creció a nivel nacional cuando el legislador debió alejarse de su cargo.
No avanza
La causa, a pesar del tiempo transcurrido, no avanza porque la Corte Suprema de la Nación aún no determinó cuál juzgado tendrá competencia en este caso. Hay dos causas en curso (una en la provincia norteña y la otra en Buenos Aires), dos jueces actuantes, pericias inconclusas, una contradenuncia de Alperovich que fue rápidamente desestimada, un cambio de juez en Tucumán en octubre. Pero casi ninguna resolución concreta.
La denunciante, una joven de 29 años quien trabajaba como asesora de Alperovich en el Congreso Nacional, publicó el domingo una carta para exponer estas indefiniciones de la Justicia. Desde el lado del que fuera gobernador tucumano durante 12 años, entre 2003 y 2015, también reclaman por una resolución pronta de la Corte antes de la feria judicial de enero. “Queremos que se esto se resuelva lo más pronto posible”, esgrime su abogado defensor, Mariano Cúneo Libarona.
Tema central para la Justicia
Dónde se investigará a Alperovich, actualmente con licencia en su cargo como senador nacional al menos hasta el 31 de diciembre, es un tema central en esta historia. La joven que denunció el hecho lo hizo primero en su provincia y luego también en Buenos Aires porque, según ella, hubo episodios de violencia sexual, física y psicológica, en ambos lugares.
“Sigo esperando, día a día, respuestas, investigaciones serias, medidas, justicia. Y mientras espero, acumulo demoras poco profesionales. Y mientras acumulo esas demoras miro a mi alrededor y advierto que ni el horror que me tocó vivir, ni los infiernos que atraviesan miles de mujeres y niñas son suficientes para que traten las causas con la responsabilidad y debida diligencia que merecen”, contó la denunciante en su carta pública en la que enfatiza el lento desempeño de la Justicia.
Seis testigos
En la causa radicada en Buenos Aires, donde interviene el fiscal Santiago Vismara y también la UFEM (Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres), a través de Mariela Labozzetta, se les tomó declaración testimonial a 6 testigos y también se hizo una inspección ocular en junio en el departamento de Alperovich en Puerto Madero.
La sobrina del ex gobernador, quien sostiene que los hechos denunciados ocurrieron entre diciembre de 2017 y mayo de 2019, declaró ante la fiscal tucumana María del Carmen Reuter durante 4 horas –donde también ya brindaron su testimonio alrededor de 30 testigos- y luego otras 5 horas ante el juez Rappa, en dos instancias de ratificación.
“Mucha gente poderosa”
Milagro Mariona, vocera de la sobrina de Alperovich, consultada por este medio sostuvo: “Esta causa es un fierro caliente porque hay involucrada mucha gente poderosa. Nosotros queremos que se nos escuche, estamos muy preocupadas porque nos sentimos desprotegidas y abandonadas por el Estado. La violencia de género sigue aumentando y la Corte Suprema no define dónde se desarrollará la causa”.
El ex gobernador, en enero, presentó una contradenuncia contra su pariente de más de 300 carillas que fue rápidamente desestimada por la Cámara de Apelaciones provincial. Allí se hacía mención a una teoría conspirativa que habrían alentado algunas personas que no comulgaban con sus ideas políticas.
fuente: infobae