Karina Moyano, la hija del sindicalista, quien es investigada por supuesto lavado de dinero a raíz de la falta de explicación sobre 100 mil dólares.
Los 100 mil dólares fueron secuestrados en 2021, en el marco de múltiples allanamientos, en una causa por narcotráfico en la que ella se comprobó no tenía nada que ver. Pero sí despertó las sospechas sobre el origen de ese dinero y presuntas maniobras de lavado de dinero.
Una mentirosa
Luego de idas y vueltas, ella había sido sobreseída y se le devolvió el dinero. Pero luego se reactivó el caso y desde el juzgado se le reclamó que vuelva a depositar los 100 mil dólares en la cuenta de incautación, pero ella dijo que ya no los tenía, porque ni bien lo recibió lo usó para pagar deudas.
Ahora, a través de una abogada, llamativamente, reclamó autorización al juzgado y el levantamiento de la inhibición general de bienes para poder ingresar al blanqueo de capitales, tal cual lo hizo en otra causa, la modelo Sofía Clerici.
Si bien en la presentación su abogada argumenta que el dinero es producto de “tantos años de trabajo” sigue sin justificar ante la Justicia el origen. Apenas sí hubo una presentación, pero que para criterio de los fiscales Cecilia Incardona y la Procuraduría de Narcocriminalidad son vagas e imprecisas las explicaciones.
Su argumento
En esa presentación, la hija de Moyano intentó explicar la posesión de los 100 mil dólares en el buen éxito de operaciones inmobiliarias personales, pero también de sus padres.
En el transcurso de la causa y al no devolver el dinero, incluso la Justicia avanzó con la tasación de una propiedad a su cargo para equiparar la suma objeto de investigación y que sigue inhibida.
Ahora, el pedido de la hija de Moyano es contra reloj, pues el plazo para blanquear capitales se ha extendido apenas hasta el 8 de noviembre y es muy probable que no llegue a hacerlo.
Las fiscales pidieron no hacer lugar al reclamo de Karina Moyano, quien intentó equipar su situación a la de Clerici, pero que según aquellas son casos distintos.
Lo tiene ella
Es porque Clerici tenía sus 600 mil dólares ya incautados por la Justicia, en cambio, la hija de Moyano, el dinero lo tiene bajo su poder y aún no lo devolvió al juez, tal cual se lo viene reclamando.
Justamente, las fiscales evalúan que es contradictorio el pedido de Moyano de blanquear ese dinero, cuando ella misma dijo que no lo tenía porque ni bien lo recibió tras ese sobreseimiento transitorio, lo usó para pagar deudas.