Se trata del cura Justo Ilarraz, que está procesado por la justicia de Entre Ríos por abuso agravado de menores cuando eran seminaristas.
La Iglesia reabrió la causa diocesana iniciada en 1992 al cura Justo Ilarraz, procesado por la Justicia de Entre Ríos, que lo investiga desde 2012 por abuso agravado de menores que tuvo a su cargo mientras fue prefecto de disciplina en el Seminario Menor de Paraná.
La reapertura del expediente administrativo fue anunciada por el cardenal y arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli. Y en ámbitos eclesiásticos se vinculó la medida con la postura del papa Francisco, que desde comienzos de su mandato fustigó la pederastia y ordenó diversas investigaciones que involucran a obispos y sacerdotes.
La noticia sobre la reapertura de la causa Ilarraz también sorprendió porque la investigación interna de la Iglesia será responsabilidad de la diócesis de Buenos Aires.
Así quedarán desafectados tanto el Arzobispado de Paraná como el Tribunal Interdiocesano de Santa Fe, que tomaron intervención en el caso durante la década de los ’90.
La investigación interna fue consecuencia de un pedido ante la Nunciatura, la representación de Vaticano en la Argentina, efectuado por los ex seminaristas que denunciaron ante la Justicia los abusos cometidos por Ilarraz.
Quienes fueron los pupilos del sacerdote tendrán la oportunidad de declarar ante un tribunal eclesiástico. Será el 2 de mayo, oportunidad en que insistirán para que Ilarraz sea exonerado como sacerdote.
Fuente: Clarín