Desde el año 2014 al 2024, la cooperativa no firmó convenio con el Municipio y funcionó como una empresa educativa con fines de lucro, desvirtuando totalmente su función y misión original.
Este jueves se vivió una jornada histórica para la Municipalidad de San Miguel de Tucumán y para la comunidad educativa de la Escuela Gabriela Mistral ya que se declaró de utilidad pública el edificio donde tiene sede la institución que era manejada por una cooperativa de servicios educativos.
Finalmente hoy, el Consejo Deliberante capitalino acompañó y aprobó la ordenanza enviada por la intendenta Rossana Chahla para recuperar la gestión de la entidad educativa.
Desde el año 2014 hasta el año 2023, la cooperativa no firmó convenio con la Municipalidad, durante esos años la misma se convirtió en una empresa educativa con fines de lucro, que cobró montos excesivos como cuotas o, si los padres se atrasaban, las deudas eran vendidas a un estudio de abogados e impedían a los alumnos continuar sus estudios.
En 2023, tras asumir la nueva gestión municipal, Chahla y su Gabinete iniciaron un proceso de diálogo con la cooperativa encargada de la administración. En ese momento se logró eliminar la matrícula y las cuotas mensuales para los estudiantes de todos los niveles, al igual que en el resto de los establecimientos educativos de administración municipal. La iniciativa aseguró que todos los alumnos accedan sin condicionamientos económicos a la educación, lo que reflejó el compromiso conjunto del municipio y la comunidad educativa.
Camila Giuliano, secretaria General del Municipio, se refirió al respecto y recordó que: “Cuando llegamos a la gestión, los propios padres nos alertaron que la cooperativa estaba cobrando cuotas irregulares a los estudiantes de la escuela Gabriela Mistral. Y nuestra intendenta tomó la decisión política de eliminar las cuotas y matrículas. Hoy con este paso en el Concejo los chicos tienen garantizada la continuidad de su educación gratuita y de calidad en su establecimiento”.
“El edificio de la escuela Gabriela Mistral vuelve a ser de los estudiantes, de los padres, de la comunidad educativa en general y no de una cooperativa privada que lo que hacía era vender un servicio de educación y no lo prestaba como un derecho a la educación gratuito y de calidad”, sentenció la funcionaria.
Alexandra Jiménez, mamá de dos alumnos de la escuela dijo que lo que sucedió esta tarde es algo que llena de felicidad a todas las familias: “Acá todos nos conocemos, ya somos una familia. Espero que esto siga fluyendo y quede entren chicos que vienen a veces, los del Semillita o Querubines y puedan pasar para la Gabriela Mistral y que no sea una presión tener que pagar para que puedan acceder a la educación que es un derecho”.
Por su parte Jesica Amante, mamá de estudiantes que asisten a la institución educativa, contó que tuvo muchos inconvenientes económicos para afrontar los altos montos tanto de la matrícula como de la mensualidad. “Me pasó te tener que solicitar préstamos para pagar la deuda que tenía con la escuela, porque lamentablemente en algunas ocasiones me pasaba de que no llegaba a pagar todas las cuotas en el año y como tengo tres hijos se me acumulaba la cuota entonces llegaba a fin de año y tenía que sacar dinero de cualquier lado, porque tenía que pagar o pagar. Me pasó también que al año siguiente, cuando comenzaban las clases mis hijos, como yo no tenía cancelado en tiempo y forma, comenzaban semanas después hasta regularizar la deuda. Agradecemos la decisión de la Dra. Chahla de devolvernos el derecho a la educación”.