Hace un año, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informaba que la pobreza alcanzaba al 40,9% de la población, por lo que afectaba a 18,5 millones de personas y se transformaba en el peor número desde el 2004, a la salida de la crisis generada con el estallido de la convertibilidad. Seis meses después, precisó que ese número se elevó al 42%, frente al 35,5% de fines del 2019.
De la mano de una mayor apertura en la economía, luego de la severa cuarentena que se impuso en 2020, hay expectativas de que la cifra, al menos, no haya empeorado respecto de estos últimos datos. En este sentido, la actividad económica mostró una franca recuperación en los primeros siete meses del año, luego de la importante recesión del año pasado, que terminó con una caída del 10% en el PBI.
Sin embargo, la alta inflación y la escasa recuperación del mercado formal de trabajo se tradujeron en un mal resultado, una vez más, según especialistas. Cabe recordar que en el primer semestre del 2020 hubo dos meses de actividad plena hasta el inicio de la pandemia y la cuarentena en marzo; en cuanto al nivel de precios, no se espera una mejora sustancial, sino más bien una aceleración después de las elecciones de noviembre, con un 46% a fin de este año y el 42% en 2022.
El experto de la UTDT Martín González Rozada dijo que “la información actualizada de los deciles de ingreso que publicó esta semana el Indec sugiere que la estimación puntual estaría un poquito por debajo del 42%.
Desde el equipo del Observatorio de la Deuda Social de la UCA Eduardo Donza sostuvo que “el dato va a estar algo por arriba del 40%, porque el mercado de trabajo no se recuperó”.
fuente: infobae