Según publicó la revista Science, tras su aplicación la memoria del sistema inmunitario se mantuvo fuerte durante al menos seis meses. Cuántas dosis recibió la Argentina.
La infección y la vacunación son los dos caminos diferentes hacia la inmunidad de rebaño. Y si bien la durabilidad de la inmunidad fue, y sigue siendo, una de las principales incógnitas de la pandemia, las vacunas de ARNm en humanos de Pfizer/BioNTech y Moderna presentan informes alentadores en ese sentido.
Una nueva muestra de ello lo representa un reciente estudio publicado en la revista Science, según el cual la protección de la formulación del laboratorio estadounidense Moderna contra el COVID-19 dura, al menos, seis meses y no hay ningún indicador de que sea necesaria una dosis de refuerzo.
Así lo revelaron investigadores de la Universidad de La Jolla, en California, Estados Unidos, quienes hallaron que la memoria del sistema inmunitario se mantiene fuerte en ese periodo, incluso con una dosis baja del preparado de Moderna, y es similar a la respuesta de las personas que se han recuperado de la enfermedad.
Ese periodo de tiempo es “fundamental porque es cuando se forma la verdadera memoria inmunológica”, indicó Daniela Weiskopf, una de las autoras de la investigación, citada por el centro universitario.
El preparado de Moderna (ARNm-1273) provocó una fuerte respuesta de linfocitos T CD4+ y CD8+, así como de los anticuerpos durante, “al menos, seis meses”, después de que los participantes en el ensayo clínico estuvieran completamente vacunados, aunque es probable que la respuesta inmunitaria pudiera durar más tiempo.
Esa “fuerte” memoria inmunitaria perduró en todos los grupos de edad, incluso en mayores de 70 años, un grupo especialmente vulnerable al COVID-19 grave.
fuente: infobae