El incremento en el precio de los combustibles que entró en vigencia desde el primer día de diciembre, traerá aparejado una serie de impactos en diferentes productos de la canasta familiar debido a la incidencia del flete en el traslado de las mercaderías, según indicaron distintos referentes consultados a nivel local.
Desde este domingo, el incremento promedio en los combustibles fue de un 6,7% en el caso de YPF que controla más del 50% del mercado. Pero no fue igual en todas las regiones del país. Las naftas aumentaron a $59,24 y $66,24 por litro, encareciéndose en $3,75 y $4,20 por litro, respectivamente.
En el caso del gasoil el incremento llevó el D500 a $55,14 y el Premium a $64,49, una suba de $3,50 y $4,05, respectivamente.
El presidente de la Cámara de Expendedores local (Cepase), Pedro Llorvandi, indicó que ‘el aumento fue variado, entre 6% y 7% en todo el país. YPF no aplicó el mismo porcentual en el norte, en el centro, en el sur y en Capital Federal. En esta última fue de un 5%, en zona norte del Gran Buenos Aires un 6,5%, luego en Córdoba un 6% y en el norte un 7%’.
Agregó que ‘este aumento fue con un porcentaje de ITC, (impuesto a los combustibles) y también el incremento que hubo en los biocombustible que llevan la nafta y el gasoil, que autorizó el gobierno y que fue de un 2%. No todo corresponde a las petroleras. Estimamos que la mitad de esta suba va a petroleras y otra parte es el impuesto y la suba en biocombustiles’.
Desde la Cámara Argentina de Autoservicios Mayoristas (Cadam) su presidente, Alberto Guida señaló que ‘siempre hay traslado a precios cuando sube el combustible. El costo del flete promedio país es un 6%, pero digamos que para el norte o el sur cuesta el doble. Sobre esas bases, habría que aplicar los porcentajes de aumento del combustible, por lo cual tendrá un impacto de 1% ó 2% en el precio de los productos’.
fuente: elliberal