Xeneizes y Millonarios ya conocen a sus rivales tras el sorteo de ayer y se ilusionan con hacer un buen certamen en los Estados Unidos. Buscarán figuras europeas y campeones del mundo.
Ayer se llevó a cabo el tan ansiado sorteo de los grupos del Mundial de Clubes, a celebrarse desde el 15 de junio hasta el 13 de julio del próximo año en los Estados Unidos. Boca Juniors y River Plate ya conocen a sus rivales, en dos zonas difíciles, pero no de las más complejas del certamen.
El Xeneize se ubicó en el Grupo C, que completan Bayern Múnich (Alemania), Benfica (Portugal) y Auckland City FC (Nueva Zelanda). El Millonario, por su parte, integrará el Grupo E como cabeza de serie y sus rivales serán: Urawa Red Diamonds (Japón), Monterrey (México) e Inter de Milán (Italia).
Es por ello que, desde el momento en que se definieron los cruces de la primera fase, los fanáticos de Boca Juniors y de River Plate se ilusionan en grande y esperan una buena erogación de dinero para reforzarse. Si se tienen en cuenta los últimos rumores de mercado, son varios los campeones del mundo en Qatar 2022 y otras estrellas que juegan en el fútbol europeo que estuvieron en el radar de los dos mejores clubes en Argentina.
En el conjunto que preside Juan Román Riquelme y comanda tácticamente Fernando Gago, hay tres nombres que pican en punta y son el gran anhelo de sus hinchas. Estos son Leandro Paredes, Paulo Dybala y Sergio Ramos. Los primeros dos, campeones del mundo con Argentina y confesos hinchas de Boca, son seguidos muy de cerca por el Xeneize.
Vale mencionar que Boca Juniors ya aseguró la llegada de Carlos Palacios como refuerzo para 2025, pero el regreso de Paredes, surgido de las inferiores del club, es un deseo latente. Aunque el mediocampista no era una prioridad para Ivan Juric, ex entrenador de la Roma, la llegada de Claudio Ranieri al equipo italiano complicó su retorno a Boca. Lea declaró su intención de cumplir su contrato con Roma hasta junio del próximo año, lo que deja abierta la posibilidad de verlo en el Mundial de Clubes. Paredes, surgido en la institución de la Ribera, siempre manifestó su intención de volver al club de sus amores. Por supuesto, no será nada sencillo lograr sus desvinculaciones del elenco italiano.
Un caso similar es el de Paulo Dybala, quien también termina su contrato en junio de 2025. Semanas atrás, Paredes declaró su deseo de convencer a La Joya para que ambos regresen juntos a Boca. Sin embargo, las decisiones de los clubes europeos y las ofertas que puedan recibir serán determinantes en el futuro de estos jugadores.
En tanto, Sergio Ramos, figura histórica del Real Madrid y con último paso por el Sevilla, al igual que Paredes y Dybala, se le vencerá su contrato en junio de 2025, lo que mantiene viva la esperanza de verlos en acción en el torneo que se disputará en Estados Unidos. El español de 38 años también tuvo declaraciones elogiosas hacia Boca Juniors. Otros que estuvieron vinculados al club xeneize fueron el colombiano James Rodríguez, con poco lugar en el Rayo Vallecano, y Lucas Torreira, quien ha manifestado en varias oportunidades su admiración por el elenco de La Boca. Más atrás aparece un nombre más “terrenal” como el de Alan Velasco, del Dallas de la MLS.
En cuanto al River Plate, el club también está evaluando sus opciones para reforzar su equipo de cara al torneo internacional. La posibilidad de incorporar a jugadores de alto nivel es una estrategia que tanto Boca como River consideran clave para competir en el nuevo formato del Mundial de Clubes, y Marcelo Gallardo tiene los nombres rutilantes apuntados.
Nicolás Otamendi, identificado hincha de River Plate, es uno de los que en el último tiempo alimentó las expectativas de los fanáticos sobre un posible regreso al fútbol argentino. Con contrato vigente en Benfica (rival de Boca) hasta junio de 2025, el defensor dejó abierta la puerta a una eventual llegada al club de Núñez en una entrevista con ESPN: “No quiero ilusionar a la gente, pero todos saben que soy hincha, que miro todos los partidos y tengo muy buena relación con los dirigentes y con los chicos que están en el club. No se sabe… Dios dirá qué es lo que pasa a mi fin de contrato”. Por su parte, su entrenador Bruno Lage también comentó al respecto: “Un día Otamendi va a querer regresar a su país, aunque nunca vamos a saber cuándo será ese día”.
Otro nombre que genera ilusión en River es el paraguayo Miguel Almirón, quien pese a ser relacionado con el club, parece continuar en el Newcastle por decisión técnica. Según su representante, “el técnico pidió que no se vaya”. Esta postura disipa los rumores que lo ubicaban como refuerzo posible para el Mundial de Clubes, a pesar de la poca participación que el jugador tuvo en su equipo inglés en los últimos meses.
Por el lado de los delanteros, los campeones del mundo Ángel Correa y Joaquín Correa estuvieron en el radar millonario este 2024. Ángel, habitual alternativa en el Atlético de Madrid de Diego Simeone, descartó una transferencia durante el último mercado de pases: “Yo estoy muy feliz acá en el club y sigo trabajando como siempre para seguir mejorando”. Mientras tanto, Joaquín, actualmente jugador del Inter, despertó interés cuando estaba a préstamo en el Olympique de Marsella, pero la alta cifra que exige el equipo italiano para su pase, cerca de 20 millones de euros, complicó las negociaciones.
Más atrás, entre los potables se ubican Juan Fernando Quintero, flamante campeón con Racing de la Copa Sudamericana y de los más anhelados por los hinchas de River Plate, donde dejó un enorme recuerdo y mantiene una gran relación con Marcelo Gallardo. Enzo Pérez, con pasado glorioso en el Millonario, podría dejar Estudiantes de La Plata y ponerse la banda roja cruzada, aunque esto es más una ilusión de los fanáticos que una realidad, porque la dirigencia no se manifestó al respecto.
El interés de ambos clubes argentinos por figuras de renombre mundial refleja su ambición de dejar una marca en el certamen mundial que le permita elevar el nivel competitivo de sus planteles. La expectativa por los movimientos en el mercado de pases se mantiene alta, mientras los fanáticos esperan con ansias ver a sus equipos brillar en el escenario internacional.
fuente: infobae