La cuarentena dispuesta por el gobierno y la recomendación de distanciamiento social con el objeto de reducir la circulación del coronavirus y limitar todo lo que se pueda su transmisión entre personas provocaron una explosión del uso de internet mediante videos por streaming, uso de redes sociales y consumo de servicios de telecomunicación.
Consecuentemente, esto empezó a provocar problemas en la red, lo que fue inmediatamente registrado por las Telcos y el Ente Nacional de Telecomunicaciones (Enacom), el regulador del sector.
En respuesta, el Enacom difundió ayer 7 recomendaciones de uso responsable de internet, para evitar un colapso de la misma, a saber:
1 Utilizar líneas fijas para llamada de voz
2 Utilizar SMS en vez de WhatsApp para mensajería instantánea
3 Evitar las comunicaciones vía streaming o videollamadas y de ser necesario minimizar la calidad de transmisión
4 Evitar el envío de materiales que no son de suma necesidad
5 Ser precisos en los mensajes para evitar idas y vueltas innecesarias
6 Utilizar racionalmente plataformas en línea que implican gran consumo en la red
7 No viralizar cadenas o informaciones no verificadas
SOLO seguir las recomendaciones brindadas por organismos oficiales del gobierno nacional, provincial o municipal
Al pie de las recomendaciones figura el lema “Comunicación responsable” y el nombre del presidente de Enacom, Claudio Ambrosini.
Recomendaciones sencillas
Ambrosini señaló que si bien la cuarentena empezó el viernes, Enacom detectó a partir del sábado un gran consumo de las plataformas de streaming, la principal demandante de los servicios de “banda ancha” que proveen las empresas de telecomunicación.
La agencia gubernamental, a partir de datos provistos por Arsat y las Telcos notó un fuerte aumento del uso de WhatsApp, debido a que durante el confinamiento la gente aumentó la cantidad de memes y, en particular, videos que envía por ese medio.
“Por eso apelamos a recomendaciones sencillas: para hablar, mejor usar usar línea fija; para algo que no exige respuesta inmediato, mensaje de texto en vez de WhatsApp; y no usar grupos de WhatsApp a menos que sea necesario”, reiteró Ambrosini.
Además, como medida más general y más allá del uso de la capacidad de la red, el funcionario señaló la conveniencia de que las consultas por internet sean “lógicas”. Al respecto, dijo que se observan muchas consultas sobre supuestos especialistas en infectología que ofrecen sus conocimientos acerca, por ejemplo, del coronavirus.
Por eso, entre las recomendaciones figuran las de no viralizar cadenas o informaciones no verificadas, seguir solamente aquellas brindadas por organismos oficiales e ignorar a los aprendices de brujo que proliferan en la red. Aunque esa recomendación es más de salud mental que de consumo de ancho de banda. “Tiene que ver, más que nada, con evitar el pánico”, explicó Ambrosini.
Del lado de la oferta, lo que hubo hasta el momento fue la decisión de las Telcos de retrotraer los aumentos de tarifas y seguir monitoreando el consumo en la red.
“Nosotros, a través de Arsat, le damos mucho ancho de banda a las plataformas educativas, para que circulen bien, pero la principal fuente de demanda de banda ancha es el uso de streaming a través de plataformas como Netflix, Amazon y HBO Go”, explicó Ambrosini.
Confinada y “socialmente distanciada”, la gente, más que cocinar, jugar a las cartas, leer o hacer el amor –aunque parezca que se acaba el mundo- mira películas por streaming.
Por eso, Enacom pidió a los proveedores de esos servicios (el grandote es Netflix) que disminuya la calidad de transmisión, como ya lo hizo en los países europeos por un período de 30 días. De hecho, Netflix quedó en contestar y este lunes Ambrosini tendrá un conference call con representantes de la firma, que maneja el tráfico regional desde EEUU.
Si se tiene en cuenta la decisión en Europa, es probable que la empresa acceda al pedido.
El domingo por la mañana aún no había información suficiente para verificar si las recomendaciones de Enacom surtieron efecto. Probablemente se pueda observar algo por la tarde.
Una complicación adicional es que varios directores de Arsat, la empresa satelital, están en cuarentena después de haber asistido al “Washington Satellite Show”, una feria mundial del sector que tuvo lugar en la capital norteamericana. Además, vieron a representantes de Hughes, empresa norteamericana que el año pasado proveyó antenas para el servicio en “banda Ka” a unos 5.000 argentinos en localidades cordilleranas.
El problema es que para la vuelta el gobierno había incluido a EEUU entre los países que quienes llegaran de allí debían someterse a cuarentena. Ese período se completará recién el próximo sábado.