Una foto que no le hace bien ni al jugador ni al club.

Leandro Díaz, uno de los goleadores de Atlético Tucumán, posó en una foto con Margarita Toro, sindicada como la jefa del clan narco “Toro” que azota Villa 9 de Julio. Como fue criticado, Máxi Toro, el más peligroso del clan dijo “dejen de quemarlo, no sean giles y si tienen algún problema, lo arreglan conmigo”. Qué nenes!!

La imagen fue publicada el fin de semana desde la cuenta en Facebook de “La Inimitable – Oficial”, la facción más importante de la barrabrava del “Decano”. “A los traidores que decidan, ¿son o no son?”, fue el texto que acompañó a la imagen del “Loco” junto a Toro.

“Somos Atlético”

La respuesta llegó desde un perfil que sería del jugador. “Disculpen el comentario pero si cualquier hincha de Atlético me pide una foto me saco con gusto. Somos Atlético, repito, Atlético”, fue el mensaje contundente para terminar con la controversia que se había planteado.

Maxi el pasado

Lo curioso es que también llegó la respuesta desde la cuenta que sería de Omar Maximiliano Martínez, conocido como “Maxi Toro”, es considerado uno de los más peligrosos integrantes del clan. “Dejen de quemarlo. Si son hinchas aplaudan porque yo soy hincha desde la cuna. Como hincha le pedimos fotos y nada más. No sean giles y si tienen algún problema, si se sacó una foto conmigo, lo arreglan conmigo. Att Maxi Toro”, sostuvo.

Sobre “Maxi” pesa una orden de captura por una causa por lesiones. A fines de noviembre pasado, el prófugo se habría tiroteado con efectivos de la Policía en plena vía pública. Un video en octubre pasado dejó al descubierto el poder de fuego de Los Toro

Las diferencias entre los barrabravas comenzaron hace un tiempo, cuando Margarita Toro acusó a Gustavo González, líder de La Inimitable, y a su hijo Abel de haber participado en su secuestro. “No tengo nada que ver con ese hecho. Pasó un episodio, pero no fuimos nosotros”, dijo el referente de la barra de Atlético en abril del año pasado.

¿Quién es Margarita?

Nacida hace 54 años en La Costanera, es la líder de los Toro, señalados por la Justicia como uno de los grupos que vende drogas en el populoso barrio de Villa 9 de Julio. Erigida en una matrona, se adentró en los negocios junto con Daniel “Ordóñez” Tévez, un reconocido dealer de La Costanera, con el que convivió durante 23 años y tuvo un hijo. Incluso, los investigadores lo señalan como uno de los precursores en la venta de paco en la provincia.

 

 

 

 

 

fuente:lagaceta

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