Con estas dosis, la Argentina completará un total de 10 millones de vacunas recibidas desde el inicio de la pandemia.
El vuelo AR 1051, el segundo de los tres programados esta semana para recibir un millón de vacunas Sinopharm fabricadas en China, aterrizó pasadas las 17:30 en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza con un cargamento de 371.200 vacunas.
Ayer a la noche llegaron 384.000 dosis desde Beijing y, el miércoles 28, arribarán 244.800 vía Frankfurt en el vuelo LH8264 de la compañía aérea alemana Lufthansa. De acuerdo a lo informado por el Ministerio de Salud de la Nación, estas vacunas se aplicarán como segundas dosis a quienes ya recibieron la primera desde que, a principios de marzo, se consiguieron las primeras partidas de este inyectable.
En lo que respecta al cargamento, cada vial (así se denomina a cada frasco) contiene una dosis de la vacuna por caja, razón por la cual el volumen de la carga es tres veces mayor y debió ser distribuida tres viajes. Las cajas de las vacunas producidas por el “China National Pharmaceutical Group Corp” son empacadas a su vez en contenedores denominados “envirotainers” (heladeras que autorregulan el frío para conservarlas entre 2° y 8°, que se denomina embalaje activo) que, de acuerdo a la estricta indicación del laboratorio, solo pueden ser transportados en el área de bodega de las aeronaves.
Cuando arribaron las primeras vacunas de China, solamente estaba autorizada para los menores de 60 años. Por esta razón se utilizó para inocular al personal docente y a las personas de riesgo de entre 18 y 59 años. Así se vacunó a alrededor de 500 mil docentes, de acuerdo a lo que se informó en la Casa Rosada.
“La ANMAT indicó que la seguridad analizada en el ensayo de Fase III entre el grupo de vacunados y el grupo placebo resulta con un perfil aceptable y hasta el momento del análisis no hubo eventos adversos inesperados o graves relacionados al producto. La inmunogenicidad correspondiente al grupo etario de mayores de 60 años presenta una cantidad de anticuerpos neutralizantes compatible con el de menores de 59 años”, según informó el Ministerio de Salud el 25 de marzo. Recién a partir de allí quedaron disponibles para que se apliquen a toda la población sin importar el rango etario.
Debido a la buena relación que el presidente argentino Alberto Fernández mantiene con su par del gigante asiático, Xi Jinping, la intención es que se firmen nuevos convenios. Pero esto se demorará porque en China se avecina el 1 de julio: se cumplirá el aniversario número 100 de la fundación del Partido Comunista y el gobierno chino se propuso una gran campaña para tener vacunados a 520 millones de sus ciudadanos. Por eso, temporalmente, se prohibió la exportación de vacunas.
Cuando se complete el arribo de este millón en el Gobierno nacional estarán atentos aguardando novedades desde Rusia y también desde China. La logística que se emplea para ir a buscar lotes de vacunas a esos destinos lleva varios días de preparación. Antes del fin de semana esperan llamados de esos dos países con la intención de avanzar con el plan de vacunación. Todavía restan casi las tres cuartas partes del contrato suscripto con el Fondo Ruso de Inversión Directa para la provisión de vacunas Sputnik V. También resta la entrega de un millón de dosis de las Sinopharm chinas, que se adquirieron mediante dos contratos, uno por un millón y otro por tres millones de dosis.
De acuerdo a las cifras que se publican diariamente en el Monitor Público de Vacunación, el registro online del Ministerio de Salud que muestra en tiempo real el operativo de inmunización en todo el país, hasta esta mañana se habían distribuido 8.701.508 vacunas en todo el país, de las cuales ya fueron aplicadas 7.214.704: 6.341.959 de ellas corresponden a la primera dosis y 872.745, a la segunda.