Thomas Handrick le dijo a su esposa Silvia y a sus dos hijos Jakob y Jonas que los llevaría a un picnic en una cueva en Adeje, Tenerife, en el archipiélago de las Canarias en España, sin embargo ahí la mató a ella y a su hijo de 10 años, sin embargo el menor logró escapar corriendo y fue encontrado deambulando a kilómetros de ahí en un poblado cercano.
Jonas, el niño sobreviviente de 7 años, había viajado desde Alemania a España junto a su madre y hermano el lunes, para visitar a su padre, quien vive en la isla de Tenerife. La pareja estaba separada, pero vacacionaban periódicamente con su padre.
En un monte de Tenerife
El martes, su padre los condujo hasta un monte cercano, pero a una zona poco frecuentada. Allí, según explicó, fue donde los agredió y acabó con su vida. Fuentes de la investigación indicaron a medios locales que, cuando encontraron los cadáveres, vieron una “carnicería”.
En el interior de esa cavidad ocurrió la agresión que conmociona al mundo, pues Thomas golpeó brutalmente a Silvia y a Jakob, Jonas le aventó una piedra a su padre y de forma instintiva salió de ahí corriendo.
Un vecina lo encontró
Jonas caminó por horas para evitar que su padre lo encontrara y que, por fortuna, fue auxiliado por una vecina del barrio de La Quinta que lo halló desorientado y con raspones.
Tras ser encontrado, una mujer holandesa llamada Annelies B. se ofreció a conversar con Jonas y lo protegió en su hogar por todo un día, mientras la Policía esclarecían el caso.
Jonas logró huir y, según le dijo a Annelies, decidió alejarse de la carretera por la que huyó para que su padre no lo encontrara, le dijo que su padre había golpeado a su madre dejándola ensangrentada en el piso y sin dientes.
En shock
Durante varias horas deambuló solo por una zona que desconocía. Tuvo la suerte de toparse con unas vecinas de la zona, que, sin embargo, no hablan alemán, por lo que no comprendieron inicialmente lo que pasaba. Como el menor estaba en shock y alterado, buscaron a alguien que tradujera sus palabras.
“No hablo alemán perfecto”, dijo Annelies a los medios españoles, pero fue suficiente como para entender la tragedia que había vivido Jonas. “No he soltado ni una lágrima para que el niño se sintiera a gusto”, explicó. Gracias a ello, comenzó a confiar más en ella y “poco a poco fue contando lo que había pasado”.
El relato del niño
El niño le dijo que su padre había alquilado un auto, preparó unos sándwiches para pasar el día en el campo y se dirigieron hacia una zona escarpada, en medio de barrancos. Una vez frente a la cueva, les dijo que tenía en su interior regalos de Pascua para ellos, una vez que entraron los comenzó a golpear. Según Annelies, Jonas vio la agresión: dejó a la madre ensangrentada y sin dientes.
La traductora también reveló que el niño le dijo: “Prefería la vida a los regalos de Pascua”.
Dormido en su casa, como si nada
Tras el testimonio de Jonas, fueron a la casa del padre, quien se encontraba dormido, sin embargo cuando fue arrestado no colaboró con las autoridades cuando le preguntaron dónde estaba su familia. Thomas Handrick mostraba heridas y hematomas en las manos.
Juan Salvador León, delegado del Gobierno en Canarias, aseguró que el ataque podría haber sido premeditado y que Thomas Handrick agredió a su esposa y a su hijo mayor con piedras. Jonas no sabe todavía que Silvia y Jakob murieron.
El País informó que Thomas Handrick, quien fue detenido, se negó a declarar ante juez, por lo que la magistrada del juzgado de violencia sobre la mujer número 1 de Arona emitió una orden de prisión sin fianza contra el presunto homicida, a quien se le imputaron dos delitos: asesinato y tentativa de homicidio contra Jonas. El pequeño permanece bajo la tutela del Gobierno de Canarias mientras sus abuelos viajarán desde Alemania para solicitar su custodia.