Una joven chilena y su novio fueron de los primeros en socorrer al joven cordobés de 19 años después de la golpiza a la salida del boliche. La familia se encontró con ellos y les agradeció la ayuda. En los próximos días declararían como testigos.
Faltaban unos minutos para las 7 de la mañana del domingo. Camila Glaverie, una ciudadana chilena, caminaba con su novio por la Rambla Gral. Artigas, en Punta del Este. Cuando llegaron a la esquina de la calle El Estrecho vieron un tumulto a unos metros, se acercaron y advirtieron cómo un joven se encontraba casi inconsciente en el suelo, con la cara absolutamente ensangrentada. Decidieron socorrerlo de inmediato.
Glaverie y su novio fueron los primeros en ayudar al joven Tomás Lacase, con graves heridas en su rostro, poco después de que fuera golpeado por el abogado mendocino Bernardo Alcanoni y otras personas a la salida del boliche local Ramsés.
“Encontramos al chico semiinconsciente en el suelo. Tuvimos que ponerlo de costado porque se ahogaba con su propia sangre”, relató la joven chilena a la agencia Télam.
Según la turista, ella nunca llegó a ver el inicio de la pelea entre el grupo de amigos de Lacase y Alcanoni y sus allegados. “No llegamos a ver quién golpeó a quién. Vimos un tumulto de gente a la distancia y encontramos a este chico tirado en el suelo”, agregó.
Así, luego se supo que la asistencia de los dos jóvenes chilenos fue determinante para ayudar a Lacase ante el grave cuadro de salud en el que se encontraba en ese momento.
“A pesar de no estar del todo consciente, tenía el acto reflejo de levantarse. Por eso es que intenté mantenerlo quieto en el suelo a la espera de que llegara la ambulancia”, describió Glaverie.
De acuerdo al relato de la joven chilena, mientras ellos trataban de asistir a Lacase, a unos metros los policías de la zona arrestaban a Bernardo Alcanoni, que había intentado escaparse.
Fue la misma policía la que llamó a los servicios de salud y la ambulancia tardó entre 15 y 20 minutos en llegar.
Glaverie junto a su novio acudieron durante el miércoles al Sanatorio Mautone, donde Lacase se encuentra internado en cuidados intensivos. Allí se encontraron con los padres del joven cordobés de 19 años, quienes le agradecieron todo lo hecho en los minutos siguientes a la golpiza.
“Estuvimos reunidos con esta gente y le agradecimos por lo que hicieron. Son muy buenas personas que colaboraron en ayudar a Tomás en los primeros minutos”, afirmó el tío del chico, Julián Baldunciel, ante la prensa.
Se espera que entre hoy y mañana los dos ciudadanos chilenos sean citados por el juez de feria Darwin Rampoldi para declarar sobre lo sucedido en las primeras horas del domingo, en las inmediaciones del boliche Ramsés.
En principio, durante el miércoles se le tomó declaración a cinco jóvenes cordobeses, que dieron su testimonio en condición de testigos. Todos ellos coincidieron en que Alcanoni corrió entre 35 y 50 metros para pegarle un golpe de puño a Tomás entre la nuca y una oreja.
Incluso, algunos relataron que cuando su amigo estaba en el suelo, el mismo abogado le aplicó un puntapié en la cabeza.
Alcanoni fue imputado por el delito de “lesiones graves intencionales”. En tanto, su abogado, Julio Lens, pidió una serie de actuaciones, entre las que se encuentra una pericia médica sobre las manos del abogado.
Pese a las muestras de mejoras, el estado de salud de Lacase todavía es delicado. Sufrió 30 fracturas entre la cara y el cráneo y, según la prensa uruguaya, tiene dos coágulos cerebrales de 13 y 15 milímetros.
Durante la noche del martes se le quitó el respirador artificial y, pese a que todavía no habló, ya reconoció a su madre y a algunos amigos.
fuente: infobae