Los dos protagonistas de “La calma que antecede al huracán”

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El multiespacio cultural “Tu punto de encuentro”de Las Talitas presentará el viernes 12 de abril, a las 20, los libros “Así de loca” y “Los ideales y las flores”, de los escritores Connie Sagripanti y Marx Bauzá. Con ellos mantuvimos el siguiente diálogo:

-¿Cuál fue tu primer contacto con la poesía?
-Cuando mi mamá estaba embarazada me leía poemas de Neruda o sea que me gesté escuchando poesía. Eso lo cuento en el primer capítulo de una novela autobiográfica que escribo. El destino quiso que me invitaran a Chile desde la Fundación Pablo Neruda para compartir mis poesías. Pero la primera poesía la escribí a los 8 o 9 años.
-¿Algún hecho puntual te inspiró?
-Mi papá se fue a trabajar lejos. Lo extrañaba y escribí algo para él. Ese día supe que quería ser poeta. Tuve el apoyo de mi maestra, la señorita Tita, que fue mi maestra de 1° a 4° grado. Tuvimos un vínculo muy fuerte.
-¿Qué tan fuerte fue ese vínculo?
-Me ayudó mucho a crecer en la escritura, no sólo en la escuela, sino que también siguió mi evolución en los concursos literarios ganados e incluso me alentó en la presentación de mi libro. Me puse nerviosa un rato antes, la llamé y su voz me dio tranquilidad. Era un incentivo para mi. Falleció el año pasado, pero pude homenajearla en vida.
-¿Cómo fue ese homenaje?
-Le hice un poema y se lo leí en una performance el día que se jubilaba en una escuela de Simoca. Fue emotivo.
-En las performances que haces hay mucho de actoral, ¿estudiaste actuación?
-No estudié teatro, pero eso tiene que ver con mi parte obsesiva de la inspiración. Al poema lo desarmo, lo rompo, lo tiro, lo vuelvo a armar y lo repito miles de veces hasta que suena bien. De ese modo logré expresiones como “si escribir no alcanza, ¿que pudiera alcanzarte?” o “Te sueño mágico veneno que embriaga”. O sea que saco la piedra de la lenteja. Después los recito, pero una parte de mi suele cambiarlos, por lo que pueden existir varias versiones de mis poemas.
-¿Cómo te vinculas con el blues?
-Lo conozco a Sebastián Ogayar, y me dice: “qué bueno que te sepas tus poemas de memoria”. Ahí surgió “Roadhouse Blues”, porque le poníamos música a mis poemas, que recitaba a puro blues. Juntos construimos un personaje: una rubia decidida, que vestía con cuero y botas altas. Era una performance desde la poesía y la música. El personaje tomó vida propia y surgió el libro “Así de loca”.
-¿Y era así de loca la personaje?
-Sí, se movía mientras recitaba y gesticulaba, tomaba el vino de la copa de alguien, se sentaba en una mesa. En Buenos Aires me tocó presentarme ante actores que participaban de la Fiesta Nacional del Teatro. Me preguntaron si había estudiado actuación y me dieron algunos consejos. También tengo que agradecerle al docente de Teatro, Mariano Quiroga, y a la actriz, Lucía Agua y Sol.
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Los-poetas-Marx-Bauzá-y-Connie-Sagripanti-juegan-ante-la-lente-de-Diario-Cuarto-Poder.
-¿Cuál es la posición que asumes desde el plano poético?
-Tiene que ver con la apropiación de mi cuerpo. Es mío y hago lo que quiero con él. Defiendo los derechos de las mujeres. El feminismo le dio vida a mi poesía, me motiva para escribir. No soy ni Susanita ni Mafalda, más bien Libertad. En esa lucha me planté contra el mundo que me atacaba y decía que era una borracha y que no hacía poesía, o los que me acosaban o criticaban por mi vestimenta. Los poetas no deben ser personas lúgubres con ganas de suicidarse.
-Alfonsina Storni se suicidó…
-Ella era peor de rebelde que yo. En su homenaje mostré las tetas en playa Varese. ¿Una poeta no puede mostrar las tetas? Tuve muchas luchas y recibí la solidaridad cuando me censuraron en un bar por mi modo de vestir.
-¿Algún sueño por cumplir?
-Que mi poesía le sirva a alguien. Por ejemplo unas chicas internadas por depresión se animaron con mis poemas. Quisiera vivir de la poesía y decirles a los hijos que tendré que tienen una madre poeta y comprometida con las cosas que le pasa a la gente.

Marx: “Reniego de la gente que no se compromete”

-¿Cómo surge el nombre Marx?
-Me inspiré en un capítulo de Los Simpson, en el que un personaje, Max Power, le explicaba a Homero que los nombres cortos son más pegadizos y fáciles de recordar. Ahí pensé que Marcos tenía seis letras y me propuse llevarlas a cuatro. Así surgió Marx, que terminó siendo un homenaje a Carl Marx o a los hermanos Marx. Lo usé en mi perfil de Facebook y a la gente le gustó. Es un apodo, pero va más allá. Es importante llamar a las cosas como uno quiere.
-¿Cómo es eso de llamar a las cosas como uno quiere?
-Por ejemplo, este barrio fue un experimento social, una obra de arte contemporáneo. Les dije a la mujer de mi papá y a una vecina chismosa que debíamos llamar al barrio con un nombre lindo y no con un número que daba la cantidad de casas. Se me había ocurrido bautizarlo como Loma Hermosa. Les encantó la idea, y mi vecina se encargó de consultar a cada vecino. Desde entonces somos el Barrio Loma Hermosa y nuestra plaza, llamada del Bicentenario, es conocida como la plaza del barrio Loma Hermosa. Fue una decisión personal y colectiva. Visto en retrospectiva estaba haciendo arte contemporáneo.
-¿Desde cuándo te sentís artista?
-De chico me gustaba el verde turquesa. Era mi crayón favorito e hice muchos garabatos con ese color. Muchos de esos dibujos aún los tengo. También mi mamá, que se llama Marta, me paraba sobre una sillita y me hacía recitar. Fueron mis primeros pasos en el arte. Ya de adulto conocí gente del ámbito de las artes y estuve en pareja con un artista que me mostró un mundo que no conocía. Con el tiempo me di cuenta que todo lo que hice pudo haber sido arte. Actividades de militancia, por ejemplo en la Tecnológica, cuando no nos dejaron participar de las elecciones estudiantiles, hicimos sin saberlo una performance con un inodoro en el que se colocaban los votos. Era gracioso porque la decisión de no dejarnos participar en la elección del Centro de Estudiantes era una cachetada a la democracia. Lo bueno fue que nunca más se atrevieron a dejarnos fuera de las elecciones. Después, en la Facultad de Artes, me construí un personaje: DJ Peluche.
-¿Cómo era ese personaje?
-Tenía un piloto color verde manzana y una remera magenta. Me posicionaba en la defensa de los derechos de la mujer y de la diversidad de géneros. En mi obra plástica usaba el verde manzana en contraposición al verde militar y el magenta, en contra del rojo sangre. Todo lo que hago está atravesado por el arte.
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Los-poetas-Marx-Bauzá-y-Connie-Sagripanti-en-Tu-Punto-de-Encuentro.
-¿Tenías algún estilo particular como DJ además de la ropa?
-Sí, zampleaba música de lo más diversa, como algo muy popular del “Conejito” Miguel Alejandro, Xuxa e internacionales. La gente al principio se molestaba, pero después entendieron que era un mensaje de una sociedad diversa, pero en la pista todos bailaban. Quería que la gente fuera feliz en ese momento, como también quiero que la gente sea feliz en la vida cotidiana.
-¿Y en la poesía?
-No me gustan las palabras difíciles que te llevan al diccionario, me gusta lo más cercano a la vida de la gente. Mi escritura es social, porque tiene que haber una coherencia en el arte visual, la música, y la poesía. No puedo negar lo que soy. Trato de ser coherente. Me gusta este tipo de escritura con diferentes voces del campo popular. Para hacer “Los ideales y las flores”. Tenía poemas escritos entre 2015 y 2016 poco antes de la llegada de Macri. Es muy política mi poesía. Son como declaraciones de vida y formas de moverte por el mundo. Refleja militancia y posicionamientos sociales.
-¿Por qué elegiste poesía política?
-Reniego de la gente que no se compromete con algo, con los derechos humanos o los de la mujer. El arte es un vehículo para los géneros. La poesía es uno de los vehículos. Desde todas mis actividades busco que la gente sea feliz, como cuando era DJ. Yo le llamaba la Revolución de la Alegría, hasta que Macri me lo robó.
-¿Recuerdas tu primer poema?
-Fue en 1° grado, mis padres se separaron cuando tenía tres años. En primer grado quise hacerle un homenaje a mi papá así que hice una metáfora con un roble, frondoso, fuerte, ramas altas y raíces poderosas. Las pocas palabras que sabía las enriquecí gracias a que en la pequeña biblioteca que teníamos en casa había un diccionario de sinónimos. Así que busqué las palabras que conocía para construir el primer poema. Lo leyó la señorita Ema y le encantó.
-¿Recuerdas tu último poema?
-Lo tengo en el celular. Se titula “El amor verdadero existe” y es una especie de homenaje a Fito Páez, Vicentico, mis comidas y bebidas favoritas, Xuxa, mi militancia en el Movimiento Humanista, y una experiencia mística en la que me conecté con Dios, era una luz muy brillante, transparente y luminosa a la que no le pude preguntar nada, pero que me dijo: “todo va a estar bien”. En los momentos de debilidad esa frase me da fuerza, fue trascendental y me dejó marcado para toda la vida.
-¿Hasta donde querés que te lleve la poesía?
-No sé. Está bueno no saber todo. No me pienso en solitario, trato de construir con otros. El arte, si no es en relación a otros, no sirve para nada. Todo lo que uno hace está atravesado por las experiencias colectivas.

La presentación

La presentación de ambos libros se realizará en “Tu Punto de Encuentro”, en calles 6 y 29 de la ciudad de Las Talitas, y estará a cargo del periodista y director del Diario Cuarto Poder, Manuel Rivas.

Serán de la partida los poetas: Flavio Cruz, Nora Lizárraga, Agustín Rivas, Mariela Díaz, Manuel Rivas, Alejandra Díaz, Candelaria Rojas Paz, Renata De Santis, Juan Gómez Romero, Julián Luna Pastore y Emilia Gutiérrez.

Mientras que participarán los músicos: Martín Taddei, QoQi Méndez y Renata de Santis Blues & Funky (con Pablo Martínez y Facundo Vergara). Invitan Edutorial Pensamientos y “Tu Punto de Encuentro”.

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