Por Fabián Seidán para Diario Cuarto Poder | El proyecto de ley de aborto legal logró media sanción en la Cámara Baja y encendió la luz de alerta en Tucumán, teniendo en cuenta que la provincia fue declarada en 2018 pro vida. A la hora de votar 4 de los cinco diputados oficialistas hicieron pesar sus razones personales por sobre los valores del pueblo y de su gobierno.
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A favor de las dos vidas
“Horas antes de la votación en la Cámara de Diputados, un grupo de periodistas le preguntaron al vicegobernador Osvaldo Jaldo cual era la postura de la provincia frente al aborto, y el titular de la legislatura no esquivó la respuesta: “La posición personal es conocida, estamos a favor de las dos vidas, a tal punto que la Legislatura declaró a Tucumán como única provincia pro vida”.
Y remarcó: “El gobernador Juan Manzur fue muy claro, está a favor de la vida: Tucumán es pro vida y no vamos a cambiar”.
En agosto de 2018, por amplia mayoría, la Legislatura local aprobaba una resolución por el cual se declaraba a Tucumán como “provincia pro vida”, a días del tratamiento en el Senado del proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo, que tenía media sanción de Diputados.
La resolución sancionada por los legisladores tucumanos estableció entonces, como política de Estado, la defensa de la vida desde el momento de la concepción en el vientre materno hasta su muerte, en consonancia con lo dispuesto por el artículo 146 de la Constitución provincial.
La medida no fue caprichosa: Jaldo reconoció que los tucumanos, mayoritariamente, están a favor de las dos vidas. Por eso sorprende que 4 de los cinco diputados nacionales oficialistas hayan votado a favor del aborto.
Festejos, aplausos, sonrisas…
Los aplausos, festejos y sonrisas, choquecitos de codos y hasta abrazos entre los diputados más entusiasmados, se confundieron en el recinto el viernes pasado, tras 22 horas de sesión habían ganado los “verdes”. Sí, aquellos que no reconocen que hay vida en el feto humano desde la concepción.
Pablo Yedlin, era el más feliz y no paraba de aplaudir. Pero no fue el único que festejó la media sanción. También lo hicieron Carlos Cisneros, Mario Leito y Mabel Carrizo. Gladys Medina fue la única que hizo honor a los valores de su pueblo y de su gobierno, votando en contra.
A Carrizo, esposa de Jesús Salim (uno los principales dirigentes de La Cámpora) se la podría entender de estar encolumnada detrás del movimiento feminista. Pero en el caso de Cisneros y Leito es incomprensible, salvo que hayan preferido abrazar la causa feministas sobre el pensamiento de su provincia, su pueblo, su partido.
¿A caso los legisladores nacionales no deben apoyar las leyes que su gente reclama y necesita? Diputados y Senadores tienen como función primordial asumir la voz del pueblo y bregar por las propuestas y mandatos del gobierno de su provincia. No son representantes de si mismo; no son autoridades, son meros agentes de la autoridad. Los diputados representan a los ciudadanos que los eligen para que atiendan y defiendan sus intereses.
Y desde ya, el aborto no es un tema que la provincia tenga en agenda y menos aprobarla.
Respetar al pueblo que los eligió
Se equivocaron Leito, Cisneros y Yedlin al votar por el aborto porque la interrupción del embarazo es un tema instalado por la clase media porteña. La gente humilde y sobre todo la que vive en el Interior del país no quiere abortar; ama y valora a sus hijos. En Salta, según las encuestadoras, el 76% es celeste, en Jujuy el 82%, en Misiones el 73%, en Tucumán 80% y así hasta llegar a la ciudad de Buenos Aires, donde es sólo del 50%. ¿Qué es lo que pasa? Un grupo minúsculo de porteños quieren imponer sus proyectos a todo el país, como lo hicieron toda la vida.
El NOA es “celeste”
Una encuesta reciente realizada por Opinaia, dio a conocer los siguientes datos: Mientras que las personas de menor edad, de nivel socioeconómico alto, residentes en el Área Metropolitana de Buenos Aires están más a favor del aborto, el mayor rechazo se da entre las personas de mayor edad, de menor nivel socioeconómico residentes en las regiones de NOA y Cuyo. La legalización del aborto genera el mayor rechazo en el NOA (66%), Cuyo (64%) y NEA (57%), mientras que el apoyo al proyecto se concentra en el Gran Buenos Aires (44%) y Ciudad de Buenos Aires (42%).
Cifras reales
En Argentina se dice que el aborto constituye la primera causa de muerte materna y que por esta razón es necesario legalizarlo para que no mueran más mujeres. Pero es falso. De acuerdo con las cifras del Ministerio de Salud, el aborto es la tercera causa de muerte materna.
En 2016 murieron 43 mujeres por embarazo terminado en aborto, pero de ese total 12 fueron aborto espontáneo (no provocado), de tal manera las muertes maternas por aborto fue de 31. El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, dijo que en 5 años tuvieron 79 fallecimientos por abortos clandestinos. Lo que muestra que el aborto no es la principal causa de muerte de mujeres.
No debería morir ninguna ni por aborto ni por ninguna otra causa evitable y para ello los diputados deberían poner el mismo énfasis en leyes que protejan no sólo a las mujeres, como la inseguridad. Pero legislar sobre eso parece que no tiene rédito político.
El Senado, la última carta
La fecha clave sería el 29 de diciembre, que podría ampliarse hasta el 30 si la discusión se extiende. Los que están a favor del aborto son optimistas sobre el escenario ya que los números de este año son ajustados, al punto que podría definir Cristina Fernández de Kirchner con su voto.
En un 2020 donde la pandemia de coronavirus se cobró la vida de más de 40 mil argentinos, la muerte seguirá siendo el tema de discusión entre los argentinos, hasta el último día.