La escritora y poetisa Lucía Nélida Soregaroli, más conocida como Lunela, se prepara para estrenar un tango en homenaje a Tucumán y Carlos Gardel, cuando se cumpla un nuevo aniversario de la muerte del “Zorzal Criollo”. Se trata de una obra que registró y presentó hace una década, pero que reluce de nuevo ante la cercanía del acontecimiento.

Dentro de poco se cumplirán 81 años de la desaparición física de Carlos Gardel. En el accidente de Medellín, el 24 de junio de 1935, moría el hombre pero nacía el mito. Desde ese momento se cantaron loas y rindieron los más variados homenajes al “morocho del Abasto”. Pero un homenaje poético desde el “Jardín de la República” merece destacarse, y más si esa sintonía poética nace del talento y la inspiración de Lunela.
Cuando se le consulta la relación entre su arte y el tango, ella expresa con esa suavidad y lucidez: “la poesía es musicalidad”. Luego señala que “tengo trece temas registrados en SADAIC, y varios de ellos son tangos. El dedicado a Tucumán y Gardel se llama Esperando tu Llegada“.
Agrega que “lo muestro como un romance entre naranjos y azahares, esperando la llegada del tango, como un gran homenaje a Carlos Gardel“.
Sobre la presentación de ese tango rememora: “no olvido ese momento, porque fue estrenado a una semana de la muerte de mi madre, quien me pidió que lo hiciera pasara lo que pasara. Fue hace más de diez años en el Museo Iramain en un evento que se llamó Velada para Lunela. El tango lo cantó Teresita Terraf, una genia, y la aplaudieron de pie todos los presentes. Allí me di cuenta de que el tango estaba muy relacionado con la poesía”.
Agrega que “desde ese momento escribí otros tangos, hice un homenaje a Piazzola, y también incursioné en boleros, rock, salsa y otros ritmos”. Ahora espera que se defina quién será el que cantará el tango en el homenaje que se realizará el 24 de junio.

Sin embargo, en esencia, Lunela es poeta. Es por ello que no sorprende que diga: “a veces le digo a la música que la voy a dejar un poco para levantar vuelo con las metáforas“. Mientras que en torno a cómo es el acto creativo en ella, explica que “tengo un lugarcito en mi casa, una luz de color verde, música de relax, después está mi jardín, y más cuando tengo el concierto de pájaros que me reclaman, en esos momentos escribo, porque es una necesidad. Estamos viviendo en un mundo violento, donde salimos y no sabemos si volvemos. A los que somos tan soñadores e idealistas nos duele mucho más esa realidad. Por eso me fortalecen estos lugares de creación y paz, además de los buenos amigos“.
Lunela tiene una extensa trayectoria, cimentada en logros e innovaciones, como el audiolibro, el contacto de la poesía con la música y aún así, sigue innovando con el mismo entusiasmo de los comienzos. Entre sus manos tiene un libro, una antología poética titulada “Un suspiro y dos almas”. Aún no la presentó. Escribe una dedicatoria y deja un último concepto sobre la necesidad de soñar: “cuando pienso que la utopía, que a nosotros nos enriquece y nos da fuerza, se va escapando mucho, me invento una paleta de luna y voy a cazarla aunque sea con otra luna para seguirla, al menos me la voy a imaginar más cerca”.

Tango: “Esperando tu llegada” (Lunela)

Se aceleran tus latidos / porque está llegando el tango / entre azahares y naranjos / entre sueños de oro y plata / hoy los poetas te cantan / dulces poemas sin llanto // Te canta también la brisa / con su traje de nostalgia / y en sus ojos la esperanza / de un romance cual destellos / hace suspirar al cielo / iluminando tus ansias / Tango… // Fiel amante de las noches / y también de madrugadas / con tus cortes y quebradas / vas marcando nuestro estilo / el de mi pueblo argentino / que se agranda con tu canto // Un dulce aroma te envuelve / te cobija con su manto. / Y si miras en lo alto / en el brillo de una estrella / verás la sonrisa amplia / de Gardel y de Lepera / iluminándote… Tango.

Lucía Nélida Soregaroli (Lunela Tucumán)

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