Letras de Fuego / Colaboración / Por Manuel Rivas*. Como todos los poetas que colaboran en esta sección, me pongo en la cola hasta que llegue mi turno y quiero rendir un homenaje a esa persona que siempre está pendiente de mí.
“Mi mujer”
Mi mujer es un vendaval,
una tormenta de ansiedad,
un verdadero temporal
de sueños coloridos.
Mi mujer es un torrente
de aguas que nunca
se quedan serenas,
ni siquiera en el descanso.
Mi mujer es el sol
que atraviesa mi alma
con sus dardos de luz,
cuando la oscuridad acecha.
Mi mujer no es mi sombra,
yo soy la de ella.
Tras sus pasos de fuego
descubro un camino.
Mi mujer es un universo,
quizás sea como Dios
en su poder creativo,
en su bondad infinita.
Mi mujer no se encierra
en las vanas palabras
de este humilde poema.
Tal vez no sea mi mujer,
Quizás yo sea de ella.
Manuel Rivas
*Fundador y director de Diario Cuarto Poder. Profesor de Letras e Historia, periodista y escritor.