El jefe de Gabinete, Marcos Peña, se refirió a las salidas de Alfonso Prat-Gay del Ministerio de Hacienda y de Carlos Melconian del Banco Central y explicó que “es normal que después de un año haya que acomodar algunas piezas”.
En ese sentido, aclaró en Debo Decir, durante un reportaje con Luis Novaresio: “Es un mito que Prat Gay y yo teníamos una mala relación, era excelente”. También dijo que “Alfonso fue un caballero durante toda esta discusión”.
Apelando a una metáfora futbolística, Peña afirmó que “hay jugadores que están jugando bien, pero el DT puede hacer cambios tácticos para que fluya mejor”.
No obstante, adelantó que “no está previsto que haya nuevos cambios en el Gabinete”. Aclaró que “de la vicepresidente Gabriela Michetti para abajo -yo incluido- todos estamos con la renuncia en la mano a disposición del Presidente, es lo natural”.
En cuanto al flamante ministro Nicolás Dujovne, Peña destacó su visión “muy moderna” de la economía y que a pesar de ser parte de la Fundación Pensar “nunca se quejó” por no tener un rol en el gobierno. “Cuando le tocó entrar, lo hizo con todo”, señaló.
Por otro lado, remarcó que “banca a muerte” a María Eugenia Vidal frente a las críticas que recibió por estar de vacaciones en Cancún durante las inundaciones. Argumentó que “siguió trabajando desde allá” y reveló que él mismo le aconsejó no volver.
Además, negó categóricamente que en las elecciones de octubre el oficialismo apele a las candidaturas testimoniales como una estrategia electoral: “No se relaciona para nada con nuestras ideas”.
Consultado sobre sus aspiraciones a ser presidente en el futuro, dijo que “nunca se imaginó esa posibilidad” porque “la experiencia que estamos viviendo es tan intensa que toda la energía está puesta en esto”.
Finalmente, rechazó que exista una “obsesión” porque Cristina Elisabet Kirchner vaya presa sino que simplemente quiere que “funcione la Justicia”. “Es la base de la república que si alguien viola la ley, pague por eso”, concluyó.