“Este es un Estado laico”, dijo la secretaria legal y técnica del gobierno, Vilma Ibarra, quien ratificó la intención del Poder Ejecutivo de aprobar la normativa por considerarla una cuestión de “salud pública”.
El Gobierno volvió a enfrentarse con la Iglesia ante el anuncio de enviar en diciembre al Congreso un proyecto de ley de legalización del aborto y planteó abiertamente que en “la Argentina hay un Estado laico que dicta leyes civiles”, por lo que el tema cuestionado desde el Vaticano debe entenderse como “una política de salud pública”.
Pese al enojo de la Iglesia
Por medio de un mensaje directo de la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, la Casa Rosada dejó en claro que avanzará aceleradamente con el tema del aborto en el Congreso más allá de la posición contraria que tenga la Iglesia liderada por el papa Francisco, quien tiene una buena relación con el presidente Alberto Fernández.
Para el Gobierno la cuestión del aborto va más allá de las doctrinas o convicciones personales. Se trata de un tema de “salud pública” y así dejó bien planteada su diferencia con el Vaticano: “Creo que somos todos respetuosos, la Iglesia está en Italia y en Italia hay legislación de aborto. Y pasa en la gran mayoría de los países de Europa”, dijo Ibarra esta tarde en la Casa Rosada al finalizar un acto que encabezó el Presidente para homenajear a César Cigliutti, el histórico activista por los derechos de los gays, bisexuales y travestis.
Es un estado laico
La secretaria de Legal y Técnica de la Presidencia explicó: “Nos parece bien que la Iglesia tenga su doctrina y sus valores. Seríamos incapaces de ingresar en alguna decisión dentro de los ámbitos eclesiásticos”. Pero de inmediato aclaró que el Gobierno “representa un Estado laico y dictamos leyes civiles”.
“Hay que ser humanitarios, respetuosos y cuidadosos de cada posición, pero estamos ante un problema sanitario”, concluyó Vilma Ibarra para desplegar una vez más el esquema confrontativo del Gobierno con la Iglesia sobre este tema espinoso.
fuente: infobae