Con la publicación de la resolución en el Boletín Oficial, el Gobierno creó un Comité para reformular el régimen a uno que sea “eficiente, suficiente y sostenible”.
El presidente Javier Milei estableció una fecha límite a los beneficios impositivos que le había otorgado el gobierno anterior a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Durante los próximos seis meses, el objetivo será reformular el régimen vigente. Esta decisión se da en el marco de la tensión existente entre el Gobierno nacional y Claudio “Chiqui” Tapia, que fue reelecto como titular de la AFA por el voto unánime de los clubes.
El decreto 939/2024 fue firmado por Milei en las últimas horas y publicado en el Boletín Oficial esta madrugada. En concreto, establece que el régimen fijado por el decreto 510, del 10 de octubre de 2023, finalizará dentro de los próximos seis meses.
Antes dejar la gestión, el gobierno de Alberto Fernández volvió a instaurar los beneficios que se otorgaron con Néstor Kirchner. Días después, se publicó una resolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), que reglamentó los beneficios impositivos y le puso como fecha de vigencia el 1 de noviembre del año pasado.
Durante estos seis meses, el Gobierno espera analizar los privilegios brindados en materia de las obligaciones de la seguridad social y reformular el sistema vigente. Para esto, el Ejecutivo creó un Comité, dependiente de la Jefatura de Gabinete, que estará conformado por un representante por cada cartera involucrada. Entre ellas, los ministerios de Economía y Justicia, la AFIP, la ANSES, la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (Capital Humano) y la Subsecretaría de Deportes. Además, habrá un delegado en representación de la AFA, dos representantes de los clubes de fútbol que participen de la Primera División y uno por aquellos que participen en las categorías inferiores. Todos ellos participarán “ad honorem”.
En ese sentido, el principal objetivo de este Comité será establecer un régimen que sea “eficiente, suficiente y sostenible para reemplazar el régimen anterior”. Sobre el impacto que puede tener esto en la economía del fútbol, fuentes oficiales precisaron que “son muchos millones de pesos”.
El ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, enfatizó (horas después de la publicación del decreto) que “la AFA opera con un régimen por el que los clubes no pagan sus obligaciones previsionales como cualquier otro contribuyente, sino que lo hacen a través de un sistema que obtiene recursos de diversas fuentes (entradas, pases y transmisiones televisivas), con los que cancelan dichas obligaciones. El problema es que la alícuota vigente no alcanza a compensar los aportes y, por este motivo, entre noviembre y abril pasados el régimen generó un déficit fiscal de unos $7.000 millones”.
En ese contexto, el funcionario señaló que “el Gobierno trabajará constructivamente para el diseño de un sistema sustentable, empezando por auditar y diagnosticar los motivos que provocaron este déficit”.
Finalmente, Sturzenegger aprovechó el tema para pedir por el ingreso de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD): “Una parte esencial de la solución pasa por la incorporación de capitales privados al fútbol, máxime si la falta de estas inversiones deriva en la necesidad de un régimen que implica una carga para el contribuyente”.
fuente: infobae