La muerte de Rodolfo Illanes se debió a golpes que le propinaron un grupo de mineros que lo secuestraron, sobre todo en la cabeza y el tórax. Evo Morales calificó de “cobarde e imperdonable” el asesinato.
El viceministro boliviano de Régimen Interior, Rodolfo Illanes, murió por un derrame cerebral causado por los golpes que le propinaron los cooperativistas mineros que lo tuvieron secuestrado durante horas, informó hoy la Fiscalía de La Paz.
Un informe forense preliminar señala que la muerte de Illanes se debió a los golpes que le propinaron “con saña”, sobre todo en la cabeza y el tórax, dijo el fiscal de Distrito de La Paz, Edwin Blanco, en una entrevista con el canal de televisión Cadena A.
“Todavía no tenemos el informe oficial (…) A grandes rasgos, se ha podido denotar una serie de equimosis múltiples, es decir (que hubo) agresión física múltiple, agresión en la cabeza y el tórax. Incluso hubo un derrame cerebral y costillas fracturadas”, señaló.
Según Blanco, hubo “un maltrato rudo” en contra de Illanes y “ha sido muy lamentable ver el cuerpo de una autoridad en esas condiciones”, reseñaron la estatal Agencia Boliviana de Información (ABI) y EFE.
Agregó que los peritos forenses continúan trabajando para dar un informe final sobre las causas del deceso, mientras que los fiscales asignados al caso empezaron las investigaciones para establecer las responsabilidades.
El cuerpo de Illanes será velado en El Palacio de Gobierno, en La Paz, informó la ministra de Comunicación, Marianela Paco.
El ministro boliviano de Gobierno (Interior), Carlos Romero, confirmó anoche que Illanes fue “cobarde y brutalmente asesinado” cuando estaba secuestrado por los mineros.
El cadáver del viceministro fue recuperado esta madrugada en una carretera de la localidad de Panduro, a 180 kilómetros de La Paz, y trasladado a la capital para que se le practique una autopsia.
Illanes fue ayer a Panduro para abrir un espacio de diálogo con los manifestantes de las cooperativas mineras que bloqueaban desde el martes las principales carreteras bolivianas para oponerse a una ley promulgada por el presidente Evo Morales.
Los mineros rechazan la norma porque estimula la formación de sindicatos en las cooperativas, lo que consideran perjudicial para el funcionamiento de ese tipo de organizaciones.
El presidente Morales afirmó hoy que el asesinato de Illanes es “imperdonable” y decretó un duelo nacional de tres días sin suspensión de actividades.