Un médico fue interceptado en plena ruta por motochorros que le robaron el auto. El robo ocurrió ayer por la tarde en la ruta 321, a la altura de Finca Mayo. Los delincuentes se le pusieron al lado y apuntaron con un arma de fuego. La víctima no sabe si volver a trabajar por miedo y nervios.
“Hace 30 años que hago el mismo recorrido para trabajar y jamás me imaginé que iba a suceder algo así”. Las palabras, con un tono nervioso y preocupado, son de Luis Ramón Cortez, un médico de 64 años que sufrió un violento asalto ayer, cuando lo despojaron de su auto en la ruta provincial 321, a la altura de Finca Mayo.
“Transitaba por el lugar habitual para ir a Los Ralos, donde trabajo. Había bajado la marcha cuando al lado se me puso una moto en la que circulaban dos personas. Uno sacó un arma y me obligó a parar el auto. Me pidieron las llaves, me dijeron que caminara sin mirar para atrás y escaparon en el vehículo”, relató la víctima del robo de un Fiat Siena (dominio OMB345).
El hecho ocurrió alrededor de las 14. Duró apenas unos segundos, pero para Cortez fue una eternidad. Eran dos jóvenes de unos 30 años. Actuaron rápido, sabían lo que querían. “Tenían un arma cromada. Recuerdo muy poco por lo fea que fue la situación para mí. Jamás me imaginé que me pudiera pasar. Siempre me entero del robo de motos en la zona, pero de algo así no estaba al tanto”, contó.
Cortez detalló que los ladrones también se llevaron algunos elementos con los que trabaja y una suma en efectivo. “No era demasiada plata”, comentó.
El vecino del barrio El Bosque dijo que luego del asalto caminó unos 200 metros hasta que llegó a una vivienda. Una persona de la zona le prestó el teléfono para comunicarse con el servicio de emergencia, ya que presentaba un golpe en la espalda que le dio uno de los delincuentes.
Luego de ser asistido por los médicos, Cortez se dirigió a la comisaría de La Florida, donde radicó la denuncia correspondiente. “No supe detallar muchas cosas por los nervios que tenía”, recordó.
“Vengo trabajando desde 30 años en la zona de Los Ralos. Nunca me habían robado, quizás esto se haya degenerado por la época que estamos viviendo. Si bien físicamente no tengo nada, psicológicamente me hicieron mucho daño. Quedé bastante afectado. No tengo en qué ir a trabajar, es como que tendré que comenzar de nuevo”, concluyó.
fuente. lagaceta