Más de 180 mujeres han hecho denuncias de abuso sexual contra la compañía Massage Envy, una popular cadena de spa estadounidense, y algunas de ellas han acusado a los establecimientos de ignorar sus quejas, según un reportaje publicado hoy por el portal BuzzFeed.
Varias denunciantes de la franquicia, que cuenta con hasta 1.200 balnearios en el país, ofrecieron sus testimonios a ese medio y alegaron que sus masajistas las manosearon y penetraron con los dedos, incidentes reportados ante las autoridades por “docenas” de clientas, aunque no se especifica durante qué periodo de tiempo.
Las mujeres alegan penetración digital y oral durante los masajes, según el informe, con más de 100 de ellas afirmando que los masajistas “manosearon sus genitales, sus pechos o cometieron otras violaciones explícitas”.
Entre las víctimas está Susan Ingram, agredida sexualmente en 2015 por su masajista, James Deiter, quien una vez detenido se declaró culpable de haber acosado a nueve mujeres en el mismo centro de Massage Envy entre 2014 y 2015.
Según el artículo, la compañía nacional nunca ha tenido que responder en una corte abierta ante las víctimas de abuso sexual de sus spas franquiciados, pero la demanda interpuesta por Ingram, que tiene su juicio previs
El reportaje destaca que el entrenamiento recibido por los gestores de los spas no incluye una preparación adecuada para abordar casos de este tipo ni orientación sobre cómo hacer las “rápidas, justas y minuciosas” investigaciones requeridas cuando hay quejas y que deben elevar a instancias superiores de la firma.
Massage Envy, con más de 1.100 filiales en 49 estados, según su sitio web, calificó las acusaciones de “descorazonadoras” en un comunicado obtenido por la AFP.
La asesora jurídica de Massage Envy, Melanie Hansen, explicó que la franquiciadora no es experta en “investigar actos criminales”, por lo que recomienda a sus balnearios que recurran a “ayuda de expertos” para investigar los posibles incidentes.
“Los clientes han sido vulnerados de maneras sorprendentes y luego han visto sus quejas hechas a un lado, mientras que a los terapistas infractores se les ha permitido seguir con su situación profesional sin consecuencias”, afirma el artículo.
En este sentido, el medio apunta que los centros de masajes en la mayoría de estados no tienen la obligación legal de reportar a las autoridades las quejas de abuso sexual que tengan lugar en sus instalaciones.
Massage Envy asegura no tener responsabilidad sobre los abusos que ocurren en sus spas debido a la naturaleza de los contratos de franquicias y señala que son estos los que controlan sus operaciones diarias, incluidas las investigaciones sobre conductas inapropiadas.
Fuente: Infobae