El caso de Juan Alberto Taján, el hombre de 68 años que fue hallado totalmente carbonizado en el interior de su vehículo VW Gol Country en el predio de una finca, generó una fuerte conmoción en Tucumán.
Las condiciones del deceso alimentaban la posibilidad de que fuera la víctima de un crimen espantoso, pero las primeras pericias efectuadas indican que fue una desgracia que inició con un trauma médico que derivó en que la víctima no pudiera evitar que su auto se incendiara ni abandonarlo cuando esto sucedió.
Una mujer lo encontró
La Fiscalía de Homicidios II, a cargo de Carlos Sale instruye la causa que se abrió cuando una mujer que informó el hallazgo del auto, detenido a mitad de camino en una finca de El Chañar.
La denunciante se aproximó y vio al conductor tomándose el pecho en el habitáculo del rodado, cuyo motor aún estaba encendido.
La mujer quiso auxiliarlo pero le resultó imposible moverlo debido a que la víctima pesaba más de 140 kilos, tras lo cual corrió hasta la estancia ubicada a unos 200 metros.
Dos peones fueron en auxilio
Allí solicitó ayuda al capataz, que envió a dos peones a que auxiliaran al hombre., pero cuando llegaron se dieron con el auto ardiendo y les fue imposible liberar a Tajan del vehículo.
Por la distancia entre la vivienda y el rodado ya en llamas, tampoco lograron apagar el fuego y tanto el Gol Trend como los restos de su propietario, fueron devorados por las llamas.
Los peritos del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) que acudieron al lugar, junto a personal de Bomberos, encontraron serios indicios para sostener la versión de la testigo.
Infarto y sobrepeso
La hipótesis que elaboraron dice que la víctima sufrió un infarto y que su pie podría haber quedado pisando el acelerador a fondo (fuera de cambio), provocando que el motor del viejo vehículo se calemtra hasta iniciar el incendio.
De todas formas restan varias medidas por realizarse para terminar de confirmar esa hipótesis.
También manejaron otras posibilidades y frente a las sospechas que estas implicaban, la mujer debió someterse a un estudio médico legal en el que no se encontró ninguna prueba que sugiera su participación en el suceso.