Política / Opinión / Por Manuel Ernesto Rivas*. El Gobernador electo Osvaldo Jaldo analiza con detenimiento y planifica al detalle la conformación de su futuro gabinete. Esta actitud contrasta con la ansiedad que reina entre las filas del oficialismo.
La dualidad de Jaldo
El Gobernador electo por Tucumán, Osvaldo Jaldo, mantiene una imagen dual por estos días: por un lado se muestra muy activo en las gestiones que desempeña, ya sea como vicegobernador o cuando queda a cargo del Poder Ejecutivo.
Y por el otro, está en una especia de “Modo Zen”, en cuanto se le pide que vaya dando pistas en cuanto a la futura conformación de su gabinete. En ese sentido, se ha mostrado hermético e indescifrable y oficialmente no ha dado nombre alguno.
En esas reflexiones, el futuro mandatario provincial no sólo baraja los nombres de los funcionarios que lo acompañarán en su gestión, sino que analiza la estructura y el organigrama para posibilitar un mejor funcionamiento del Estado.
Una fecha precisa
La incógnita se develará en poco tiempo, porque el propio Osvaldo Jaldo anunció que su equipo de colaboradores será dado a conocer luego de las elecciones presidenciales, previstas para el próximo 22 de octubre.
Mientras tanto, entre las filas del oficialismo hay ansiedad e inquietud, porque suponen que el nuevo Gobernador marcará alguna diferencia en cuanto a su modo de gestionar, con una dinámica distinta a la de su antecesor.
Jaldo ya demostró su modo de gobernar cuando Juan Manzur se fue a la Nación como Jefe de Gabinete. Sin embargo, esa impronta se proyectará y potenciará aún más con un equipo propio y una estructura que permita agilizar la gestión.
Los ineludibles
En el núcleo duro del “jaldismo” hay nombres que no pueden ser dejados de lado a la hora de conformar un gabinete confiable y eficaz. Es por ello que el Ministerio de Gobierno, de no mediar sorpresas, parece estar destinado a Regino Amado.
El Ministerio de Seguridad podría quedar bajo su órbita. En tanto que la cartera de Obras Públicas, podría ser ocupada por Marcelo Caponio, quien ya tiene conocimiento sobre esa área y eso le daría algo de continuidad.
Un área clave es el Ministerio del Interior y Jaldo lo sabe bien, porque él ocupó ese cargo alguna vez. Esa área estaría destinada a Darío Monteros, el actual intendente de Banda del Río Salí es un hombre de su entera confianza.
Un gobierno histórico
El resto de los nombres pasa más por la especulación, las ansias y los deseos. Lo cierto es que Osvaldo Jaldo tiene la idea de poner su propio sello a una gestión que aspira que no pase desapercibida en los libros de Historia.
Como contador público nacional, se trata de un hombre pragmático, al que le gusta enfrentar los problemas y es por ello que se muestra atento a cualquier novedad y busca solucionarla de manera ágil y concreta.
Esa vocación la conocen propios y extraños. Es por ello que el inicio de su gestión genera mucha expectativa. La mirada también está, por estos días, en el escenario político nacional, que muchas veces ayuda tener el mismo signo político.
Por lo pronto, el Gabinete será presentado luego de las Presidenciales. Allí se develarán todas las incógnitas y se descolgarán los trajes de asunción.
*Creador y director de Diario Cuarto Poder. Profesor de Letras e Historia, periodista y escritor.