Por Pablo Batalla* para Diario Cuarto Poder / Un verdadero “León”. Su verdadero nombre es Lázaro Simón Talamonti, tiene 4 años, y en su corta existencia lucha contra un cáncer terminal. Las trabas para su traslado desnudaron las urgencias en torno a la campaña electoral.
Desesperación en las redes sociales
Cuando Juliana Ibarra, de 31 años, y mamá de Lázaro, conocido como “León” por su entereza para enfrentar un cáncer terminal, grabó un video para pedir por el avión sanitario, no se imaginaba la solidaridad que iba a despertar en los tucumanos.
En el video (publicado por distintos medios, entre ellos La Gaceta), ella señala que las autoridades provinciales le explicaron que para ir a buscar a su hijo, el avión sanitario de la provincia debía llevar a otro niño o paciente en emergencia.
Pese a la contundencia del pedido, los funcionarios parecían estar en otra sintonía, porque la respuesta demoró y la urgencia del traslado ameritaba celeridad. Finalmente la solución llegó y el niño fue recibido con una fiesta en el estadio del Club Atlético Concepción.
Declaraciones en falso
La propia Ministra de Gobierno, Carolina Vargas Aignasse, había afirmado: “Estamos ultimando detalles necesarios a la hora de trasladar pacientes con estas características para que tenga asistencia necesaria en el vuelo”.
Después la funcionaria lo dio por hecho, sólo aclarando que “con la mayor urgencia y premura posible vamos a garantizar ese regreso que está dependiendo de varios factores sanitarios y tramites que se piden para abordar el avión”.
También el gobernador, Juan Manzur, sostuvo que el avión estaba disponible para el traslado. Sus funcionarios lo habían expuesto, en vez de solucionar el inconveniente, y el mandatario quedó mal parado.
¿Quién lo trajo en realidad?
Ante la demora, la respuesta vino por el lado de la Municipalidad de Banda del Río Salí, en la persona del intendente Darío Monteros, la diputada nacional Gladys Medina y el vicegobernador Osvaldo Jaldo, quienes contrataron un avión sanitario.
La solución trascendió porque tanto la madre del niño como la abuela, señalaron que hace varios meses, desde el municipio bandeño ayudaban anónimamente a la familia, que debía permanecer en Buenos Aires, mientras el niño era tratado en el Hospital Garrahan.
“Darío (monteros) jamás nos dejó solos, siempre nos dio todo e hizo siempre lo posible para que León esté feliz en este tiempo con sus hermanitos y todo desde hace un par de meses en que él tuvo la recaída. Esto no es política”, expresó la mamá.
En el anonimato
En ninguna de las redes sociales ni en los actos de campaña de los candidatos se mencionó el caso de “León”. Juliana Ibarra dijo: “Darío Monteros no me dejaba que yo lo nombre, pero yo lo nombro porque yo sé que lo hace de todo corazón”.
En tanto que Griselda, la abuela del niño dijo que Monteros y su esposa contaron con el apoyo de Jaldo, y afirmó: “siempre estuvieron al pie del cañón y jamás pidieron una foto ni que se viralice nada de lo que ellos hacían por nuestra familia”.
Lo cierto es que a la llegada del niño ninguno de los referentes que ayudaron lo fueron a recibir, ni aparecieron en la cancha del Club Atlético Concepción, en Banda del Río Salí, en donde el pequeño fue recibido y agasajado por la comunidad bandeña.
Una verdadera fiesta
El pequeño “León” fue trasladado a las instalaciones del mencionado club, en donde pudo abrazar a sus superhéroes favoritos, sin saber que él era uno de ellos. Se vivieron momentos emotivos, recibió regalos y Piñón le cantó canciones.
La sonrisa del pequeño Lázaro no tenía precio. Ha regresado a su casa, porque en el Garrahan ya hicieron todo lo que estaba a su alcance. Sin embargo, este “León” de cuatro años se permite sonreír, soñar y disfrutar más allá del dolor que siente.
Esa mirada iluminada basta para sentir que los niños son lo más importante en la construcción de un futuro mejor. En ese concepto se excluye cualquier especulación política, que seguramente las habrá.
*Columnista, analista político.