Es recurrente que en los allanamientos que impulsa la justicia ordinaria, independientemente del delito que se investigue, se encuentre estupefacientes. En esa circunstancia, bien se puede hablar de dos causas diferentes. Una de orden provincial (por el hecho original que impulsó la medida) y otra federal (a partir de la droga que se incauta en el allanamiento).
Esta situación conlleva a una serie de trámites judiciales para determinar la competencia de la segunda parte de la causa (droga) y la posterior comunicación de la misma a la Justicia Federal. Esa diligencia no es otra que la declinación de la competencia que debe requerir el fiscal interviniente al juez de turno, para que ésta salga de la órbita de la justicia provincial y pase a la federal.
Atento a que era menester atender esta contingencia y minimizar los tiempos de comunicación a la Justicia Federal, el Ministro Fiscal, Edmundo Jiménez, emitió una resolución para que los fiscales soliciten la declinación anticipada de la competencia, ante el hallazgo de droga en algún procedimiento.
En las instrucciones impartidas por Jiménez a los fiscales de los Centros Judiciales de Capital, Concepción y Monteros, se deja establecido que al tiempo de efectuar el requerimiento de allanamiento, el fiscal solicite al juez de turno la declinatoria de la competencia en forma anticipada, como así también a que la autoridad designada, sea judicial o policial, comunique rápidamente, mediante acta, esta declinatoria al Juzgado Federal que se encuentre de turno.
De este modo, si acaso se encuentra droga, se evita la demora que hasta la puesta operativa de esta resolución, solía ser extensas y generaban serios inconvenientes.