Natalia Candido estaba cambiando a su bebé de 6 meses. Otro de sus cinco hijos, G., salió a la calle a recoger leña en un barrio de Mar del Plata. Desde afuera, entonces, comenzaron a llegar gritos, quejidos y ladridos. Cuando se asomó, vio una escena salvaje: una jauría de 16 perros atacaba al nene de 9 años. “Pensé que lo mataban”, dijo la mujer.
El episodio ocurrió en el barrio de Virgen de Luján, en el noroeste de la ciudad balnearia, horas después del brutal asesinato de una adolescente de 15 años que fue atacada por dos dogos en Córdoba.
“Un montón de perros lo estaban mordiendo por todos lados”, relató Natalia. “Lo agarraban como un trapito”, insistió. Maximiliano, un vecino, salió al rescate del nene, pero fue un chiflido lejano lo que logró disuadir a los animales. Los lugareños aseguran que ese sonido provino del dueño de la finca donde vive la jauría.
El nene quedó herido en los brazos, las piernas, la cabeza y el torso. Lo trasladaron al Hospital Interzonal Especializado Materno Infantil, de Mar del Plata, donde estuvo internado y fue sometido a varias operaciones. Finalmente, este miércoles le dieron el alta para que siga la recuperación en su casa, con “curaciones y medicamentos”, como detalló su madre.
“Mi hijo no se puede mover, le duele todo. Por suerte, nunca perdió la conciencia. Nada más cuando entró a cirugía me decía ’Mami, no te vayas’, y me pedía perdón”, añadió la mujer.
“Me duele mucho, sobre todo la pierna. Me asusté mucho”, dijo el nene, en una entrevista con El Nueve.
De acuerdo al relato de una vecina, los perros pertenecen al dueño de una quinta que cría canes. “El propietario de la finca jamas se acercó a ver al nene ni accedió a hablar con los padres, todo muy deshumano”, expresó Edith, testigo del ataque.
El barrio, de casas bajas y precarias, abunda en pastizales y descampados donde corretean los animales. “Hay muchísimos perros sueltos, nadie se hace cargo. Pido que se lleven a los perros que atacaron al nene”, solicitó Natalia, este miércoles al mediodía, cuando le dieron el alta a su hijo.
fuente: clarin