Durante la tarde del viernes, Javier Radaelli y su padre Edgardo llegaron al hotel Del Parque sobre la Ruta Nacional N°12 en Corrientes, no muy lejos de la capital provincial. Dejaron su camión Mercedes Benz blanco en el playón del lugar; solo Edgardo, de 65 años, introdujo su documento y su nombre real en el registro del lugar. Su parada de descanso fue de lo más conveniente. La Justicia había seguido de cerca su periplo por varias provincias. Era cuestión de horas; los Radaelli iban a caer presos antes de que terminara el día.
Cerca de las 20 horas, la PFA irrumpió para detenerlos: en la parte trasera del camión estacionado había más de dos toneladas y media de marihuana paraguaya.
La jueza federal Arroyo Salgado está a cargo del caso, con una investigación sobre los Radaelli que comenzó en abril. Padre e hijo tienen sus domicilios legales en la zona de San Fernando, que es jurisdiscción de la magistrada. Javier, según fuentes cercanas al expediente, estaba encargado de manejar el camión. De 37 años, había trabajado hasta comienzos del año pasado en una empresa de gestión aduanera. Poco después, enfrentó una demanda por desalojo en la justicia civil de San Isidro. Su padre, un monotributista, es quien está registrado como transportista ante la AFIP. Por otra parte, figura como uno de varios socios de una empresa familiar también dedicada al transporte según el Boletín Oficial.
De vuelta en la zona norte del Gran Buenos Aires, la jueza mandó allanar un domicilio donde se encontró una máquina de contar dinero entre otros elementos útiles. Pero lo más jugoso llegó con dos procedimientos en la capital correntina. Un punto sobre la calle Groussac arrojó más marihuana -apenas un kilo-, balanzas y documentación útil para la investigación. Un segundo punto en el Barrio Universitario trajo algo de particular interés para la jueza: papeles que no solo vinculan a Radaelli padre e hijo, sino también a un célebre capo narco del submundo correntino.
La provincia, por otra parte, se convirtió en un punto caliente del tráfico de marihuana. Es un lugar estratégico para los camiones que cargan producto en Paraguay para abastecer al mercado villero en Capital y el GBA: con el lote encontrado en el camión conducido por los Radaelli ya van más de once toneladas incautadas en Corrientes en los últimos nueve meses.
En mayo, una extensa investigación del juez Sergio Torres publicada por La Nación llevó al procesamiento con prisión preventiva de 24 presuntos integrantes de una banda que usaba la zona de Itatí como foco de redistribución, con dos campos y una estancia como centros de acopio. La semana pasada, Prefectura detectó con cámaras térmicas una lancha sobre el río Paraná que cargaba 700 kilos y que sus dueños abandonaron.
Los Radaelli, por otra parte, no son el único grupo familiar detenido este fin de semana con una acusación narco. En Las Lajitas, provincia de Salta, a 230 kilómetros de la capital, el Escuadrón N°45 de Gendarmería detectó más de 25 kilos de cocaína en un Fiat conducido por una pareja con sus dos hijos menores. La pareja, de nacionalidad argentina, fue detenida; los menores fueron restituidos a uno de sus abuelos.