Aunque la huelga de choferes alcanza solo a 4 compañías, el gremio y la Cámara Empresaria de Larga Distancia se culpan mutuamente por la suspensión de casi todos los servicios.

Los choferes de ómnibus de cuatro empresas de transporte de pasajeros de larga distancia realizan a partir de la cero de hoy un paro de actividades. Lo hacen para denunciar que las empresas están “incumpliendo” con una suba salarial del 21 % dispuesta por el Ministerio de Trabajo de la Nación ante la falta de acuerdo en la paritaria del sector.

En este marco, esta mañana, el titular de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, denunció que en la terminal de Retiro “hay empresas de larga distancia que tienen cerrados los portones y no permiten salir a ninguna unidad“.

A su vez, el portavoz de la Cámara Empresaria de Larga Distancia (Celadi), Gustavo Gaona, negó categóricamente que las empresas realizaran un “lock out” patronal y aseguró que “hay delegados de UTA que paralizaron otros servicios”.

En diálogo con radio La Red, Fernández afirmó que al encontrarse cerrados los portones “no permiten salir a nadie”, y aclaró que las empresas afectadas por la medida de fuerza hasta el martes son Flecha Bus, TATA, San José y Vía Bariloche.

Según el dirigente, de no cumplir las empresas con el pago del aumento salarial fijado por el Ministerio de Trabajo, el martes continuarán con la medida otras empresas. Y señaló que esta metodología fue la elegida “para no perjudicar a los pasajeros”.

Fernández justificó la medida: “Desde hace cinco meses venimos discutiendo paritarias y esperando que las empresas paguen el aumento dispuesto por el Ministerio de Trabajo”.

En tanto Gaona, tras sostener que ellos no habían firmado “ningún compromiso salarial”, responsabilizó al Ministerio de Trabajo por haber dictado una resolución “disponiendo un aumento salarial del 21 por ciento, que nosotros recurrimos”. El vocero de la Celadi también le apunto al Ministerio de Transporte porque, señaló, no se cumplieron los compromisos asumidos desde esa cartera en relación a un nuevo marco regulatorio que permita a los micros readaptarse a las necesidades del usuario, lo que deja a los ómnibus en desventaja frente a otros medios de transporte.

El representante de las empresas también hizo foco en “el crecimiento sostenido de servicios irregulares bajo la mirada indiferente de las autoridades de control”. Además agregó que era constante el aumento de todos los costos que las compañías estaban evitando trasladar a las tarifas para detener la caída de pasajeros. Y se quejó por una “quita irregular de compensaciones, únicamente al ómnibus de larga distancia”.

“Los empresarios están buscando una solución económica a su situación por la disminución de pasajeros, pero primero tienen que cumplir con la ley y después pedir”, afirmó Fernández, de la UTA, por su parte.

La paritaria de los choferes de larga distancia venció el 30 de abril y desde entonces la UTA advirtió sobre posibles paros si no se arribaba a un acuerdo salarial. Frente a la falta de acuerdo entre las partes, el 18 de agosto el Ministerio de Trabajo determinó una suba de 21 por ciento, en tres tramos (agosto y octubre de este año y enero de 2018), una medida que se oficializó el 28 de agosto con la publicación de la resolución en el Boletín Oficial.

Comments

Comentarios