Así lo anunció la ministra de Gobierno y Justicia, Carolina Vargas Aignasse en conferencia de prensa. “Tienen que acatarlo las entidades gremiales suspendiendo las medidas que tenían previstas”, aseguró.

En vísperas de un paro de 48 horas convocado por ATEP para este miércoles y jueves, un nuevo capítulo se abre alrededor de este conflicto salarial: el Gobierno de la Provincia decidió dictar la conciliación obligatoria e instar a los gremios docentes a dejar sin efecto las medidas de fuerza anunciadas en las últimas horas.

Fue la ministra de Gobierno y Justicia, Carolina Vargas Aignasse, acompañada de su par de Economía, Eduardo Garvich, quien hizo el anuncio en conferencia de prensa. Allí, la funcionaria señaló que “la decisión que ha tomado el gobierno provincial respecto a los hechos que son de público conocimiento, en el marco de la ley 14.786, que es la ley que regula los conflictos laborales, es dictar la conciliación obligatoria”. Esto, apuntó, “es un procedimiento previsto de manera legal que, como su nombre lo indica, es de cumplimiento obligatorio, tiene consecuencias referidas a la abstención del dictado de medidas de acción directa”.

Asimismo, aclaró que “esta conciliación nos obliga a las dos partes, tienen que acatarlo las entidades gremiales, suspendiendo las medidas que tenían previstas, y tenemos que acatarlo desde el sector del gobierno que estamos negociando salario, en cuanto a que ninguna de las partes podemos tomar medidas”. En cuanto a la extensión de la medida, afirmó que “el lapso es de 15 días hábiles, es lo que la ley habilita y se puede extender cinco días más”. Es decir, por lo menos hasta el 30 de agosto tendrá validez esta medida, pudiendo extenderse hasta la primera semana de septiembre.

“Nuestra posición es que hemos hecho propuestas económicas, lo que priorizamos es la voluntad de diálogo y lo que la ley regula tiene por objeto posibilitar que estas discusiones salariales se puedan realizar en el marco del buen entendimiento, sin la presión de una medida de fuerza”, enfatizó Vargas Aignasse. Además, adelantó que los docentes han sido convocados para el jueves a las 10 de la mañana para continuar con las negociaciones. “Esperamos que podamos arribar a un buen entendimiento”, indicó.

El ministro Garvich, a continuación, explicó algunos puntos de la propuesta del Gobierno que fue rechazada por los gremios docentes. El funcionario remarcó que “hace ocho años venimos negociando con este sector y siempre fue en buenos términos”, además de destacar que “cada parte cede algo para llegar a un entendimiento en cualquier negociación”.

Con respecto a la propuesta en sí, aseguró que se trata de “un acuerdo para el trimestre agosto-septiembre-octubre (últimos meses antes del cambio de gestión), de recuperar de acuerdo a la inflación prevista, manteniendo el poder adquisitivo de los trabajadores” y especificó que contempla “un incremento del 40% del básico, siendo el 20% en agosto, el 10% en septiembre y el 10% en octubre“. Además, detalló que hay “una serie de medidas complementarias que atienden a las necesidades de determinados sectores de la docencia: se provee un incremento del adicional de jerarquización (supervisores, directores, etc), que pasa del 6 al 8%; también se establece un adicional del 5% sobre el básico, zona, escalafón y estado docente, para los profesores de 15 horas secundarias y 12 horas terciarias, que tiende a equiparar la situación con los maestros; un adicional por persona para todos los docentes, siendo el mayor aporte en agosto para tener un efecto inmediato en el bolsillo docente; también hay un aumento en el escalafón docente a partir de los 36 años de antigüedad, un sector que estaba un poquito rezagado”. Subrayó que “la inflación proyectada para el lapso de febrero a octubre es del 92% y ese es el incremento que estamos logrando para los trabajadores de la docencia en general, en algunos casos la supera”.

Con respecto a la contrapropuesta docente, indicó que “un sector está planteando un incremento en el básico del 148% en tres meses (casi el 50% por mes, ante una inflación que está en el 6 0 7 mensual) y plantea un incremento del salario mínimo del 52%, más del doble de la inflación prevista”. Esto, afirmó, “es inalcanzable para nosotros, además de que es injustificable respecto a la inflación”.

 

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