La ex ministra de seguridad nacional, Patricia Bullrich, volvió a referirse al uso de las pistolas Taser y en este caso tomó como ejemplo el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell. Dijo que si las fuerzas de seguridad cuentan con ese elemento se pueden parar situaciones similares en la vía pública.
“Con una Taser, al rugbier fortachón, violento y animal lo dejás sin recursos”, afirmó Bullrich en diálogo con La Red. “Muchas veces minimizamos las cosas y cuando pasan estas cosas nos agarramos la cabeza”, lamentó.
En esa línea e insistiendo con los beneficios de su uso, la ex funcionaria destacó: “Las personas (en situaciones como las de Villa Gesell) tienen miedo porque están fuera de sí. Cómo parás a esos pibes. Con una Taser en dos segundos lo controlás y lo bajaste”.
Semanas atrás, la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, derogó una serie de medidas que había tomado Bullrich, en relación al uso de armas por parte de las fuerzas federales. Por medio de una resolución se dio de baja el reglamento para el uso de las pistolas Taser.
“Si había un miembro de una fuerza de seguridad con algún recurso lo podría haber evitado”, agregó Bullrich sobre el crimen de los rugbiers y sentenció: “Es mejor que el uso de una nueve milímetros”.
Además, dijo que los empleados de seguridad de los boliches también deberían contar con herramientas para repeler situaciones de peleas. “Los patovicas deberían tener algún tipo de instrumento para controlar situaciones de extrema violencia. Las taser son una buena herramienta para esos casos”, indicó pero luego aclaró que su uso sería ideal para los policías.
Bullrich también opinó que el gobierno bonaerense no tiene la culpa de lo ocurrido y dijo que la violencia es un problema que atraviesa a la sociedad en el presente. “Hay excesos y violencia que evidentemente no tiene que ver con la policía o el ministro porque es imposible que estén en todo momento y toda circunstancia”, indicó y remarcó: “No podemos echarle la culpa al gobierno por esto”.
En la misma línea, agregó que “lo que tenemos que aprender los argentinos es a tener mayor convivencia y mayor control de nosotros mismos y de la comunidad. Estas escenas se repiten a menudo en Buenos Aires. Aprender a trabajar una cultura de paz es fundamental para todos los argentinos”.