Por Julio Denis* | Unidades sucias, frecuencias que, pese a las promesas del Concejo no se controlan, taxis en pésimas condiciones y que no cumplen con la ordenanza SUTRAPPA, siempre los usuarios perjudicados.
La comisión de Transporte del Concejo capitalino aprobó por unanimidad un nuevo incremento en las tarifas de taxis y colectivos.
El boleto de colectivo tendrá un incremento del 50% y saldrá $45. En tanto, la suba en los taxis rondará un 30%. La bajada de bandera aumentará de $ 39 a $ 50, mientras que la ficha cada 100 metros se elevará de $ 3,90 a $ 5.
Mentiras y engaños
Seguramente esta es una historia repetida para todos los tucumanos, los empresarios piden aumentos siderales, como buenos negociadores van de más a menos, y los parlamentarios les aprueban algo menos así todos pensamos que nos hicieron un “favor”.
Tras esta situación, los empresarios aseguran que ya que no obtuvieron lo que solicitaban, el servicio no puede mejorarse, y todos pagamos el boleto más caro y seguimos soportando estos abusos de parte de ellos y de quienes en teoría nos representan.
Hace años que escuchamos a los parlamentarios capitalinos hablar de los controles de las unidades, de la colocación de GPS para constatar el cumplimiento de las frecuencias, de la colocación de cámaras para luchar contra los delitos, pero todo resulta solamente propaganda electoral.
Los usuarios siguen soportando unidades sucias, esperas interminables, ni que hablar de fin de semanas y feriados y los ya “clasicos” paros de los que lamentablemente ya nos tienen acostumbrados.
¿Y donde está el SUTRAPPA?
Algo parecido pasa con los taxis, donde según la misma ordenanza, los vehículos deberían cumplir con la Ley Nacional de Tránsito Nº 24.449, las unidades deben contar con cinturones en las 4 plazas y apoyacabezas, o sea que decenas de vehículos la incumplen diariamente.
Ni que hablar de las especificaciones técnicas:
Esta demás decir que todos esos Fiat UNO no cumplen con la tipología y tampoco con la Ley Nacional de Tránsito, sin contar que muchas unidades tienen más de 10 años, pero gracias a las “extensiones” otorgadas desde el Concejo siguen transitando, estaría bueno que a los usuarios también los alcanzara esas “extensiones”.
Ante esta situación todos nos preguntamos ¿hasta cuando seguirán subsidiando a empresarios que todo el tiempo aseguran que estan quebrados y lo harán con los usuarios? Pues de ellos sale el dinero de los subsidios y también el del boleto.
La clase trabajadora depende del transporte público para poner en marcha al país, es tiempo que esta clase política entienda que esta situación es insostenible y que los únicos intereses que tienen que ocuparlos son los de quienes los pusieron en esa función, el Pueblo.
*Columnista de Política y Actualidad