La Primera Confitería, tradicional paraje camino a San Javier por la ruta 338, será otra vez una alternativa más para tucumanos y turistas en los cerros. La reapertura fue con la presencia del gobernador Osvaldo Jaldo y el Jefe de Gabinete de la Nación, Juan Manzur.
Luego de 33 años sin actividad, la Primera Confitería, el tradicional paraje camino a San Javier por la Ruta Provincial 338 volverá a funcionar siendo una alternativa más para tucumanos y turistas en los cerros de la provincia, con el trabajo en conjunto de reparticiones estatales como el Ministerio de Obras y Servicios Públicos, el Ente Tucumán Turismo, la Dirección Provincial del Agua y entidades del sector privado.
El grupo inversor “Hotel Bicentenario S.A”, adjudicatario de la concesión del nuevo bar, había adelantado que la inauguración de la renovada Primera Confitería estaba prevista para el próximo 18 de noviembre.
El predio contará además con un salón para eventos privados, un hostel y un drugstore prontos a inaugurar.
“Estamos orgullosos de en tiempo récord poder recuperar este lugar que era emblemático para los tucumanos”, explicó Carolina Vanni. Recordó que el contrato de concesión fue firmado el 26 de octubre del año pasado y “hoy un poco más de un año ya estamos haciendo realidad este proyecto”.
Explicó que tiene distintas etapas el emprendimiento. Hoy se inaugura el chalet estilo neocaliforniano del año 1938 que va a funcionar como un restaurant y salón de fiestas. Abajó hay un drugstore. A mano izquierda hay un hostel de montaña, llamado Las Yungas que se inaugurará en diciembre. Y otro salón de eventos denominado Buterfly.
Un espacio en el corazón de cada tucumano
La Primera Confitería de San Javier, que hoy perteneciente al patrimonio cultural de la Provincia, fue inaugurada en la tarde del domingo 22 de mayo de 1938 bajo el nombre de Confitería Parque Aconquija.
Tras una lluviosa noche, el sol reapareció para coronar este acontecimiento que atrajo la atención de numerosos tucumanos. El emblemático sitio guarda un lugar importante en el corazón de cada ciudadano.
En su momento se constituía como la salida obligada para las familias en el camino a la cima del cerro San Javier, un gran paseo de fin de semana. Con esta recuperación, el Ente de Turismo busca restablecer el vínculo de los tucumanos con este espacio, además de invitar a los visitantes de otras provincias y países a sorprenderse con la exuberancia que ofrece la naturaleza en Tucumán y, al mismo tiempo, disfrutar de un servicio de calidad.