El Frente Sindical de Universidades Nacionales profundiza el conflicto en reclamo de recomposición de los salarios y la ampliación del presupuesto educativo previsto para 2025.
A raíz de la “emergencia presupuestaria en curso” y que “se agravará en 2025″, la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) anunció que no inscribirá nuevos estudiantes a las carreras de Tecnicatura Universitaria en Programación Informática (TUPI) y Licenciatura en Informática (LI) hasta nuevo aviso.
“Consolidado el veto a la Ley de Financiamiento Universitario y en función del proyecto de Presupuesto enviado por Poder Ejecutivo al Congreso, la Universidad no puede garantizar el acceso en condiciones adecuadas a dichas carreras, por lo cual ha determinado pausar la inscripción de nuevos ingresos, para asimismo asegurar calidad educativa a los/as 5.505 estudiantes que actualmente tienen las dos carreras”, informó la casa de estudios.
Según la UNQ, las dos propuestas académicas tuvieron un “crecimiento exponencial” en los últimos años y que contaban con el “apoyo del Estado Nacional y con el compromiso de recursos propios”. Pero que la situación presupuestaria que el actual gobierno plantea para el 2025 “ve imposibilitada la inversión en tecnología indispensable para el dictado de clases a más estudiantes, como así también restringida la posibilidad de contratos o ampliaciones de la planta docente”. De igual manera, el deterioro salarial que sufre la docencia universitaria “hace cada vez más difícil sostener el plantel de profesores/as de estas especialidades”.
“Esa suma de factores hace que la UNQ se vea obligada a tomar una decisión no deseada, pero inevitable. La TUPI y la LI continuarán dictándose para sus actuales estudiantes y se espera que el actual apremio económico se revierta para poder retomar la inscripción de nuevos/as estudiantes”, señalaron en el comunicado.
La inversión educativa nacional se redujo 40% en 2024: es la caída más grande desde 1992
El dato se dio a conocer en el marco de un nuevo paro universitario en contra del Gobierno. El ajuste aplicado este año sobre el sistema educativo es casi el doble que la reducción del gasto público con respecto a 2023,