Cada año la nota negativa del verano en los destinos turísticos de Tucumán la daba El Mollar, con las imágenes que difundían deportistas y lugareños después de las noches de fiesta en las playas del lago La Angostura.
Ahora desde la comuna se tomó una medida tendiente a cambiar esta situación, mediante la prohibición del consumo, la venta y el ingreso de bebidas alcohólicas al entorno del espejo de agua del dique, cuyas orillas solían quedar tapizadas de residuos.
El comisionado Jorge Cruz emitió una resolución en la que señala como primer argumento la creceiente problemática ambiental que ocasionan los residuos sólidos urbanos en el entorno del dique.
Pero también destaca la sucesión de actos de vandalismo provocados por veraneantes y residentes en etado de ebriedad, que ocurren especialmente en la temporada estival.
Luego estaca que el lago forma parte de una reserva natural y constituye el principal atractivo turístico por su potencial para la realización de deportes acuáticos, la pesca deportiva y el avistaje de aves.
Con estos argumentos, el funcionario resolvió la prohibición total de venta e ingreso de bebidas alcohólicas al lago, que además contará con un sólo ingreso habilitado para facilitar el control del cumplimiento de la nueva normativa.